El camino hacia la meta volante de Cabo de Hornos, en la quinta etapa de la Volvo Ocean Race, se está tornando en un clímax de verdadero nerviosismo.

Nadie se atreve en la Volvo Ocean Race a poner rumbo directo al Sur, hacia el temido Cabo de Hornos a tan sólo 1400 millas, y es que de nuevo se abren dos grandes opciones tácticas.

Recuperado ya de la encalmada que lo dejó prácticamente parado durante las últimas horas, el Ericsson 3 cabalga ya directo hacia el Cabo de Hornos a una velocidad de 15 nudos y más de 100 millas de sus hermanos del Ericsson 4.

Navegando en vientos fuerte viento de popa, la tripulación nórdica abrió una ventaja que llegó a las 280 millas anoche al paso de la flota por el Océano Sur en la quinta etapa en dirección a Río de Janeiro, Brasil.

Mientras el Ericsson 3 de Magnus Olsson continúa su trepidante bajada hacia Cabo de Hornos en solitario, el chino irlandés Green Dragon da aviso de un nuevo peligro, cuando navega cerca la Latitud 50 y siendo el barco que navega más en el Sur, la aparición de los siempre peligrosos icebergs.

El equipo nórdico continúa en cabeza y aumentando su ventaja frente al resto de la flota. El Ericsson 3 se encuentra navegando en la segunda puerta de exclusión del hielo (Latitud 45 Sur) y actualmente cuenta con la mayor ventaja acumulada entre el primer y ultimo clasificado en lo que se lleva de la Volvo Ocean Race (651 millas de beneficio)

La nada usual táctica de una ruta Noreste en busca de la meta volante de Cabo de Hornos, le ha dado al Ericsson 3 un liderato que sigue pagando dividendos. Y es que el equipo nórdico del Ericsson 3 lleva la friolera 126 al segundo clasificado Puma.

La arriesgada táctica del Ericsson 3, tras el paso de la meta volante, con la que apostaron por un rumbo Noreste –a la contra del clásico rumbo Sur- para ir hacia Cabo de Hornos, escribe desde hoy una pagina en la historia de la Volvo Ocean Race.

Las últimas horas a bordo del barco español han sido de todo menos tranquilas… Una importante avería en el estay de proa ha puesto en jaque a una tripulación que si por algo se caracteriza es por su tesón y espíritu de lucha. Y gracias a eso, siguen adelante. El patrón del “Telefónica azul”, Íker Martínez, nos cuenta lo sucedido y cuál es la situación actual a bordo.

La avería en el estay (cable de tensión del mástil desde proa) le obliga a bajar el rendimiento en rumbos de ceñida y priorizar la seguridad del palo sobre la velocidad del barco