Recopilatorio de las notas de prensa de masmar.com. Diciembre 2002

Rajoy admite que una nueva marea negra puede llegar a las costas gallegas.
Una inspección submarina corrobora que el fuel ha contaminado los fondos del mar. El hidrocarburo del «Prestige» reposa sobre los lechos y también se desplaza entre aguas .

El Gobierno sabe ya, con los datos de las primeras inspecciones del "Nautile", que también de la popa del "Prestige" fluyen decenas de toneladas de fuel.
Confirmadas las peores noticias, ya estaban en la cabeza de todas las personas, que despues de las milongas largadas por las bocas de los responsables gubernamentales, no se creian absolutamente nada de eso de la congelación, las bajas temperaturas y bla bla bla....
El petrolero, hundido a 3.900 metros de profundidad a unos 250 kilómetros de las Cíes, y separado en dos partes se ha convertido en un polvorín, en una bomba de relojería, en una espada de Damocles que penderá de las cabezas de todos los que vivimos de cara al Atlántico.
Nuestro porvenir estará marcado por esos dos trozos de chatarra del que saldrán sucesivas mareas negras que amenazan con asolar el litoral durante años.

Las imágenes captadas por el sumergible, que tras dos días en busqueda de la popa, la localizó a 3.700 metros separada de la proa, provocaron el salto de alarma total. Los investigadores que las han estudiado presentan un escenario de suma gravedad. En la popa ha aparecido al menos una abertura de 90 centímetros por la que salen al mar unos 45 litros de fuel-oil por minuto, o lo que es lo mismo más de 50 toneladas al día, según las primeras estimaciones.

Francia ya lo había advertido por activa y por pasiva: el Prestige ha provocado la peor marea negra de la historia y la catástrofe puede subir de intensidad en los próximos días. El submarino francés Nautile ha detectado fuertes distorsiones en la estructura del petrolero y ha advertido que el riesgo de que colapsen es muy alto. Entre las dos zonas se vierten a la superficie ochenta o más toneladas cada jornada.

El Gobierno se limitó ayer a informar exclusivamente de su hallazgo, pese a conocer la mala situación de la popa, pero a esto nos tienen más que acostumbrados. En un comunicado oficial precisó que "los resultados de las evaluaciones realizadas por el batiscafo francés en sus cinco inmersiones están siendo estudiados".

Los daños en la proa y la popa se originaron, por un lado, en el impacto del barco cuando se hundió y por las fuertes presiones a las que está sometido a 3.500 metros de profundidad.

En su primera inmersión, el Nautile ya advirtió deformaciones en la estructura, para ilustrar el caso, el ejemplo del tubo de pasta de dientes. Provoque un pinchazo en una parte del tubo y presione este con la mano. ¿A que sale un chorrito?. Pues es simplemente una ley física.

En estos momentos, de los tanques del Prestige afloran cada día entre 50 y 80 toneladas, un dato confirmado por las autoridades portuguesas ¡como no¡ y ahora también por el Gobierno.

Estas fugas han corroborado la tesis de que el fuel no se solidifica, una hipótesis que, además del Gobierno español, también sostenía el certificado de calidad emitido por el laboratorio holandés Saybott, que analizó el fuel del petrolero al ser embarcado en el puerto de Tallín (Estonia). Según el diario francés Le Monde, la ficha técnica de la carga indica que este hidrocarburo se endurece a seis grados de temperatura, algo que el Nautile ha puesto en entredicho con sus inmersiones.
Nada indica que el fuel se haya solidificado porque era transportado a 60 grados en el petrolero y su baja conductividad térmica provoca un enfriamiento muy lento.

En la proa, el carburante fluye por cuatro grietas, alguna de unos 40 centímetros de diámetro, pese a la sensación de "hilillos de fuel" como plastilina solidificada ja ja ja ,como las describió el vicepresidente Mariano Rajo y que acabó por admitir que de la proa, según algunos estudios, se fugaban entre 30 y 40 toneladas de crudo.

Expertos que asesoran al Gobierno central en la crisis vaticinan que ante esta situación el "Prestige" puede estar vaciando fuel al mar durante años.

Siempre una pregunta tan negra como el chapapote y que nunca ha sido contestada, es la relación del día a día de la tragedia. Quien fué la inteligentsia que mandó la bomba ecológica mar adentro. Quien midió las consecuencias. El tiempo quizas algún día nos traerá la noticia.

La bomba de explosión constante mientras le dure la mierda de sus entrañas, llamada casco del Prestige, vomita producto. La pelota está en el tejado de los técnicos. Las posibilidades para atajar el problema en la zona pasan por varias elucubraciones. Todo el mundo pide que se lo piensen bien, desde luego in situ y con todos los datos posibles, riesgos medidos y controlados y por supuesto, aúnque sea de perogrullo, la mejor, independientemente que sea la más cara. Ahora señor Aznar ya no nos vale controlar el deficit cero. Esta tierra, mi tierra, le importan tres pimientos sus datos macroeconómicos. Resuelva el problema, y si no sabe, pues ya conoce el camino.

Una de ellas sería volar el barco con cargas de profundidad. Esta actuación consistiría en intervenir directamente en el casco del petrolero con voladuras que permitieran romper sus tanques y cercar toda la zona del hundimiento para tratar de extraer allí mismo el fuel que emerja a la superficie. Para ello habría que esperar meses, quizás al verano, a la llegada de un periodo de relativa tregua en los vientos y corrientes marinas en la zona del hundimiento para poder actuar con eficacia. (Sin entrar en disquisiciones, a este redactor, una vez leido algo sobre las corrientes, viscosidades y comportamiento del fuel le parece en extremo arriesgada, aunque controlen los hombres de Harrelson.)

Otra posibilidad pasaría por extraer la carga de fuel que permanece en los tanques mediante una complicada operación de bombeo, dada la profundidad a la que está hundido el buque, pero quizas la más adecuada.

Las otras dos alternativas pasan por complejas operaciones de ingeniería: sellar las grietas detectadas en la proa y en la popa del "Prestige" o realizar el encofrado completo de ambas partes, para evitar fugas futuras. Todas estas actuaciones están condicionadas por el tiempo que requieren, que además puede variar el comportamiento del fuel.

El «Prestige» ya ha vertido al menos 35.000 toneladas.

Ni 3.000, ni 10.000, ni 20.000. Las toneladas vertidas por el Prestige es ya de, al menos, 35.000 toneladas. Un informe confidencial del Gobierno cita expresamente esta cantidad (entre 30.000 y 35.000) y deja en entredicho las estimaciones públicas que hacen sus propios portavoces, que desde el martes 17 de noviembre han ido elevando sucesivamente el volumen del derrame hasta las 20.000 toneladas a las que alude en la actualidad el vicepresidente primero, Mariano Rajoy. Recuerdan el simple cálculo matemático que proponíamos en masmar.com, los primeros días del accidente, cuando las cifras que informábamos eran totalmente distintas a las facilitadas, por el hoy perdido en combate Arsenio Fdez. de Mesa

Los datos del Ministerio de Fomento citan 14.000 toneladas recogidas en tierra y mar -sin incluir las recuperadas por el sector de forma manual, sumemos las que aún se desplazan frente a las costas Atlánticas y Cántabras, como la calculadora gubernamental ya funciona, parece ser que les faltaba fuel para arrancar su maquinaria, las cifras, eso si, confidenciales suma esa atrocidad de metros cúbicos muy superior a la que se afirmaba públicamente, algo que ahora ha quedado confirmado.

Segunda marea

La entrada de una borrasca prevista para este lunes, con el consiguiente role del viento al SW, apuntala el dicho marinero de lo que la mar se lleva, la mar lo devuelve. A partir del lunes, estas corrientes de componente oeste desplazarán las manchas que se encuentran frente a las costas gallegas y portuguesas hacia el litoral gallego.

El panorama es desolador. Si se cumplen las previsiones del Ejecutivo, que en esta ocasión sí coinciden con las del Instituto Hidrográfico portugués, a mediados de semana empezarán a entrar en determinados puntos de la costa los vertidos que ya están frente al litoral gallego. El momento crítico llegaría a partir del fin de semana, con la aproximación a la costa de las grandes manchas localizadas en el área del hundimiento, a unos 250 kilómetros a la altura de las Cíes. Portugal detectó ayer dos nuevos afloramientos, de dos y seis kilómetros cuadrados, en esta zona.

Así las cosas, los efectos de la marea negra se extienden imparables al litoral del Cantábrico y a Portugal. Sin alcanzar las dimensiones de Galicia, lo cierto es que cientos de voluntarios luchan en Asturias, Cantabria y País Vasco contra el chapapote, que ha asolado numerosas playas. Por el momento, entre las tres comunidades han recogido unas 50 toneladas, una insignificancia en comparación con las 3.000 que flotan fragmentadas por el Cantábrico, y que incluso están ya a pocos kilómetros de Francia. En el caso portugués, el Hidrográfico ha detectado vertidos muy fragmentados en alta mar en la franja comprendida entre Camiña y Oporto.