Tres grandes marinos se intercambian el liderato de la Vendée Globe

Dalin frena, Simon arrea
«¡Decidimos hacer un sprint en medio del Pacífico para ver quién es el más rápido!», bromea riendoYoann Richomme, que lleva una gran chapka, guantes y calcetines de abrigo. «Hace mucho frío». «Tenemos un bonito recorrido de velocidad en un mar agitado relativamente suave, vientos de 20 nudos de media, picos de 35 nudos. Hace fresco y se va rápido».
El patrón del PAPREC ARKÉA admitió que gritaba de alegría en el barco sabiendo que acababa de ponerse en cabeza ayer. Pero la alegría le duró poco. Sébastien Simon se colocó en cabeza a primera hora de la mañana, beneficiándose de estar amurado a estribor y, por tanto, de poder apretar al máximo su Groupe Dubreuil IMOCA sobre su foil bueno. Por su parte, Dalin, volvió a ponerse en cabeza al final de la mañana y mantuvo una ligera ventaja esta tarde.
Podemos sacar conclusiones: Sus rendimientos son similares en esta amura.
La incognita la proporciona Simón, cómo le irán las cosas cuando vuelva a trasluchar.
Los tres patrones se espían, se filman, y se gastan bromas.
Disfrutando del juego, Dalin envió un vídeo en el que admitía tener «un problema con su vela. Pero lo arregló... «Fue un poco complicado trabajar en el armario de las velas con el barco moviéndose a 30 nudos. Tardé 36 horas en repararlo pero ya está, ¡estoy feliz de anunciar que el MACIF Santé Prévoyance está al 100% de su potencial! »

La diferencia con los perseguidores parece fija por el momento. Pero para este grupo, liderado ahora por Nicolas Lunven (Holcim-PRB, 4º), están teniendo la oportunidad de apretar el acelerador tras varios días ralentizados con vientos flojos. Ahora se están viendo atrapados por un frente que Justine Mettraux (Teamwork-Team Snef) ha pilotado con gran eficacia hasta el punto de recorrer 524 millas en 24 horas (con una media de 21,83 nudos).
Ahora en décima posición, tras haber sido superado recientemente por Boris Herrmann (Malizia Seaexplorer), el británico Sam Goodchild ha estado tratando de asimilar la pérdida de algunos puestos frente a barcos más rápidos y nuevos, luchando con sus principios fundamentales de no presionar en exceso a su barco de la generación 2019, que terminó sexto en la última regata, para tratar de igualarlos, pero al hacerlo añade demasiado riesgo cuando está a mitad del Pacífico.
Está bien, no tiene problemas y sabe que queda mucha regata por delante.
Por detrás, Clarisse Crémer (L'Occitane en Provence, 12ª) y Sam Davies (Initiatives Cœur, 13º) se encuentran ahora en otro sistema. Tienen vientos flojos y periodos de ceñida.

Problemas, ....
El grupo liderado por Sébastien Marsset (FOUSSIER, 23º) se prepara una vez más para ser alcanzado por un frente. ¿El menú? Unos treinta nudos de media y rachas de 50 nudos. Por detrás, Guirec Soudée (Freelance.com, 29º) también avanza con vientos fuertes y debe lidiar sobre todo con un mar embravecido y olas de 6 metros, al igual que el japonés Kojiro Shiraishi (DMG MORI Global One, 30º) y el patrón suizo Oliver Heer (Tut gut., 31º).
«Un problema al día o más», como solía decir el doble ganador de la Vendée Globe Michel Desjoyeaux, Tanguy Le Turquais (Lazare, 22º) admitió haber tenido que lidiar con un marco longitudinal (un refuerzo estructural que soporta las fuerzas sobre el casco como un chasis) parcialmente desprendido. Pudo repararlo, pero fue un trabajo largo y duro que le dejó exhausto.

Pero sigue en regata, a diferencia de Szabolcs Weöres (New Europe), que atracó en Ciudad del Cabo dos días después de su retirada.