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Anthony Marchand (Actual Ultim 3) termina cuarto en la ARKEA ULTIM CHALLENGE - Brest

Anthony Marchand (Actual Ultim 3) termina cuarto en la ARKEA ULTIM CHALLENGE - Brest

El patrón francés Anthony Marchand ha conseguido esta tarde el cuarto puesto en la ARKEA ULTIM CHALLENGE - Brest al cruzar la línea de llegada frente a Brest con el ULTIM Actual Ultim 3 a las 14:08:21h UTC.

Marchand, que cumplió 39 años durante esta primera vuelta al mundo en multicasco en solitario, tuvo que parar dos veces para realizar reparaciones técnicas, una en Ciudad del Cabo tras perder su foil de babor y otra en Dunedin (Nueva Zelanda) por problemas con el mecanismo de su foil de estribor. Compitiendo con el ULTIM, que al igual que el Macif de François Gabart ostenta el récord mundial de la vuelta al mundo en solitario más rápida, Marchand se vio privado del uso de los foils y tuvo que adaptarse para lograr el mejor rendimiento posible.

En menos de dos años, "Antho" ha pasado de ser uno de los mejores competidores en solitario de la clase Figaro one design offshore a dar media vuelta al mundo a bordo del IMOCA Biotherm en The Ocean Race y ahora completar esta regata ULTIM en solitario en un tiempo de 64 días 1 hora 38 minutos 21 segundos. Llega 13d 6h 20m después del ganador de la regata, Charles Caudrelier.

Cuando cruzó la línea de meta esta tarde, para ser recibido por los miembros de su equipo Actual, sus seres queridos y quienes le apoyan, Anthony Marchand sin duda rememorará el recuerdo más destacado del momento en que el propietario del equipo y antiguo patrón, Yves Le Blevec, le ofreció el timón del famoso gigante ULTIM. Fue después de haber entregado el Ultim 3 Actual de vuelta de Guadalupe y de la última regata de la Route du Rhum que Le Blevec acababa de completar en solitario. Sorprendentemente, de eso hacía poco más de dos años.

"Yves (Le Blevec) estaba dispuesto a confiarme su barco", recuerda. "Fue en ese momento cuando me dije que era capaz de dar la vuelta al mundo a vela. Y el día que firmé con Actual, fue un 'sí' meditado, no una respuesta precipitada. A partir de entonces, la vuelta al mundo a vela fue mi única y sana obsesión, hubo un año de entrenamiento, tres etapas de The Ocean Race y aún el gran salto".

Dos paradas, dos golpes en el cuerpo, dos nuevos reinicios

El día de la salida hizo sonreír al público por lo relajado que parecía al principio. Preguntado por su noche previa a la salida, respondió: "Tuve tiempo de pasar el rato, relajarme y comer un buen plato de pasta boloñesa", dijo entonces. Eso sí, derramó algunas lágrimas cuando embarcó en Actual y abandonó el muelle. Y aguantó bien el ritmo en los primeros días de un emocionante sprint. Antho" tiene la juventud de su lado, la pasión y los duros hábitos de conducción del Solitaire du Figaro. "Cuando llegue el momento de intentar hacer algún movimiento, lo haré". Y así fue como se mantuvo en contacto con los cuatro primeros en el Golfo de Vizcaya, hasta Madeira antes de ser la menor potencia y potencial de velocidad de su barco le hace perder ante los cuatro primeros ULTIM - Maxi Edmond de Rothschild, SVR Lazartigue, Banque Populaire XI y Sodebo Ultim.

Pero "Antho" no está solo mucho tiempo. Adelanta a Armel Le Cléac'h, que ha tenido que hacer escala en Recife, y juntos luchan por la larga ruta que rodea el anticiclón de Santa Helena y bordea la ZEA. Pero tiene que detenerse tras un impacto en el foil (23 de enero). Su escala en Ciudad del Cabo dura algo más de 24 horas, el equipo Actual logra una proeza logística, y el patrón se marcha con un barco "no al 100% pero sano" tras retirar el muñón del foil dañado, para estar listo para el Océano Antártico. Solo en el océano Índico, el navegante decide hacer una nueva escala en Tasmania (11 de febrero), ya que el mecanismo que mantiene el foil de estribor en posición baja ha fallado.
"En ese momento, fue una gran decepción, no pude contener las lágrimas". recordó. Pero el equipo está ahí para que vuelva a reparar y la acogida en Dunedin es calurosa.
'Antho' incluso hace un viaje surrealista para comprar "alimentos frescos" en el supermercado. "Allí estaba fuera de onda". Confiesa que llevaba semanas sin lavarse y asegura que seguía en modo carrera.
Marchand no se libró de las condiciones

Cuando retomó la regata, Marchand tuvo que empezar de cero. "Sin el foil, los flotadores permanecen en el agua con las olas rompiendo en las vigas de proa. Cada movimiento hace que el barco sea mucho más frágil y las alarmas no paran de sonar". No sólo vio disminuir su velocidad, sino que las condiciones también eran mucho menos cómodas. Navegar en un foiler sin su foil es algo que suele significar que tus nervios están a flor de piel todo el tiempo. "No tiene sentido pensar en ello. Tienes que seguir adelante", dijo. Fuera de vista, era toda una hazaña. Antho" no exageraba. Apretaba los dientes y a veces se enfadaba mucho, pero todo eso ocurría lejos de todo el mundo, en la soledad de su cabina.

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Las condiciones meteorológicas tampoco le permitieron tomarse un respiro. Ráfagas de viento de más de 45 nudos en el Pacífico, pero luego sólo raras ráfagas en el Atlántico Sur, le obligaron a maniobrar como nunca antes en la costa con mares de 3 a 5 metros de altura durante los últimos días de la regata. Enfrentándose a todos los estados de mar y viento imaginables, las condiciones le garantizaron que estaba luchando en mucho más que una regata y que se trataba de una auténtica aventura. Yves Le Blevec, jefe del Team Actual, lo resumió así: "Antho llegó muy lejos en términos de compromiso y nadie sale de ahí sin sentir algo".

Junto a Charles Caudrelier, Thomas Coville y Armel Le Cléac'h, patrones con tanta experiencia, había un patrón que aún no ha cumplido la treintena (39 años) y que no ha terminado de subir peldaños en el mundo de las regatas oceánicas. Había soñado con completar una regata alrededor del mundo, pero al final pasó por casi todo, en términos de condiciones, emociones, determinación y terminó con honores. 'Antho' ha desarrollado su talento, su capacidad para soportar lo peor, su calma ante la adversidad y su capacidad para ir más allá de sus límites.

En pleno Pacífico, declaró: "En el mar, siempre hay mucho estrés. Pero eso no es lo mismo que el miedo. Es algo que se necesita para estar escuchando el viento todo el tiempo, atento a una ligera bocanada de aire y permaneciendo alerta por si suena una alarma". Marchand piensa como los demás en su deporte, pero no es un marinero cualquiera. Es, de hecho, uno de los más grandes de su tiempo.

La regata de Anthony Marchand en cifras:
Fecha y hora de llegada: Lunes 11 de marzo / 15:08:21hrs
Tiempo transcurrido: 64d 1hr 38m 21s
Millas navegadas: 29 948,03 milles
Velocidad media real: 19,48kts