Histórico triplete español en el Príncipe de Asturias
España volvió a demostrar que es una potencia mundial en el piragüismo de fondo. Los deportistas nacionales se dieron ayer un festín en aguas de la ría de Pontevedra y coparon el podio del XXXI Trofeo Príncipe de Asturias. Solo la selección de Chequia fue capaz de ofrecer una mínima resistencia, pero acabó pagando el esfuerzo y tuvo que conformarse con la cuarta posición.
El K-4 de España A formado por Jorge Alonso, Santiago Guerrero, Emilio Merchán y Álvaro Fernández Fiuza cumplió los pronósticos y cubrió los 19 kilómetros de recorrido en 1h08'35''. A continuación cruzó la meta situada en A Ponte do Burgo en pleno Lerez a su paso por Pontevedra la segunda tripulación española de Javier Noval, Miguel Fernández, Emilio Llamedo y Albert Corominas. Llegó con un retraso de dieciséis segundos después de remontar buena parte de la desventaja en el tramo del río Lérez. La tercera embarcación roja perdió 2'07'' y certificó el neto dominio español en el Príncipe de Asturias por cuarta temporada consecutiva. Los hermanos Carlos y Andrés Luelmo del Teso, Julio Moreno y Rafael Carril completaron el podio con color rojo y gualda.
La salida se realizó puntualmente desde la playa de Baltar, en Portonovo. España B llegó líder al primer porteo. El equipo nacional A le seguía de cerca y Chequia mantenía viva la esperanza de dar la campanada. Sin embargo, el regreso al agua coincidió con el hundimiento de la tripulación centroeuropea, que fue perdiendo fuelle a medida que avanzaba la prueba. Los dos combinados nacionales mantuvieron un cerrado pulso hasta el segundo porteo. No obstante, España B cometió un ingenuo error en la playa de Raxó y sirvió en bandeja la victoria a sus compañeros de la A. La segunda tripulación española golpeó el timón contra el arenal y se vio obligada a recolocarlo. Ese precioso tiempo fue aprovechado por España A para abrir un hueco imposible de recuperar. El percance hizo que Chequia volviera a acariciar la segunda posición, pero ?España B se repuso del golpe y con un remar firme puso metros de por medio.
Los últimos kilómetros apenas tuvieron emoción. La única incógnita era saber si España C iba a ser capaz de dar caza a Chequia para firmar el triplete. Y eso ocurrió en la boca del río Lérez. El poco público que siguió la prueba agradeció el esfuerzo de los jóvenes piragüistas con una cerrada ovación.
Unos minutos más tarde se vivió la lucha K-4 de clubes. El Piragüismo Vilaboa, que también logró la tercera plaza, se llevó el gato al agua con un tiempo de 1h09'22. La selección de Castilla y León fue segunda con 1'33'' de retraso. El C-4 lo ganó el Breogán de O Grove. Superó en cerca de cinco minutos al As Torres de Catoira y en más de seis al Náutico O Muíño de Ribadumia.