El 72 Descenso Internacional del DSella, que se disputará el 9 de agosto, ha inscrito ya a once nacionalidades

Esa cita que, cada año, se hermana con un río o con un lugar. En esta ocasión Lugo ha sido el lugar el Miño el río elegido. La teniente de alcalde de este Ayuntamiento, Sonia Méndez, agradeció a los organizadores «por habernos escogido para este hermanamiento». Méndez alabó la labor del Principado, de los Ayuntamientos y del Codis por sacar adelante una cita que, dice, «es el símbolo del deporte fluvial».

Este año aún se desconoce el número de inscritos a la prueba, pero en nacionalidades que tomarán la salida del cauce asturiano ya se habla de once. «Esperamos poder llegar a veinte», aseguró el presidente del Comité Organizador del Descenso del Sella (Codis), Emilio Llamedo. Él mismo aseguraba que en esta edición no va a resultar fácil señalar a un favorito: «desde el punto de vista deportivo será una prueba muy abierta». Lo que nadie duda es que el Sella continuará su éxito este año. A juicio de Llamedo, «los Juegos beneficiarán al descenso porque todos aquellos que queden descartados acudirán a bajar el Sella», aseguró. Adaptados y veteranos El acto, que tuvo lugar en la Casa de Cultura de Arriondas, tuvo un protagonista: el cartel. El dibujante Francisco Ibáñez se llevó todos los elogios de las personalidades que desfilaron por el escenario. Y no es para menos. En palabras del alcalde de Ribadesella, Ramón Canal, «el cartel representa lo que se vive en el Sella, «una mezcla de culturas y razas» sobre un fondo lleno del color que caracteriza al dibujante de Mortadelo y Filemón. Como dijo el director de Deportes, Misael Fernández Porrón, «a ver qué deportista asturiano que practique el piragüismo no sueña con bajar el Sella» sobre todo si la seguridad «está garantizada» como resaltó el Daniel Fernández, de la Delegación de Gobierno.