Getaria. El puerto abrigado. La patria de Elcano
Getaria es mar y es tierra. Parte de este municipio, el situado en el tómbolo del Monte de San Antón o Ratón de Getaria, isla hasta el s.XVI, y donde se encuentra el puerto mira y vive para la mar. Hacia el interior sus caseríos se mezclan entre el color del viñedo y el olor a la tierra trabajada y a uno de sus más apreciados productos, el txakoli de Getaria.
Y siempre fue así desde el inicio de los tiempos, el Túmulo de Arriaundi (4.000 ac) lo evidencia, aunque será la dominación romana quien le haga entrar en la historia. En el devenir de esta será, al igual que Donosti, el rey Sancho VI de Navarra que hacia finales del s.XII le concede fueros confirmados en los años siguientes, por los reyes de Castilla
Un hecho destacable sucede en 1397, cuando en la iglesia de San Salvador se instituye la Hermandad de Guipúzcoa, germen del actual Territorio Histórico.
No podría ser de otra manera, su privilegiada situación como importante puerto mercantil y pesquero conllevó riqueza y desgracias, de estas constatar que fue incendiada y destruida varias veces. En 1628, en su bahía se libra una importante batalla naval entre las escuadras francesa y española, siendo deshecha esta última y quedando la villa destrozada. Durante la Guerra de Independencia, Getaria es tomada por las tropas francesas, quienes la abandonan en 1813 tras causar gravísimos desperfectos.
La vocación como pueblo de pescadores y navegantes ha sido tradicional en Getaria. Durante cientos de años la caza de ballenas tuvo una gran importancia en su economía. De hecho, la ballena ha sido históricamente el motivo principal de sus escudos. Así de entre aquellos getariarras que surcaron mares en todas las direcciones destaca la figuras de Juan Sebastián Elcano (Getaria 1487-1526). Navegante en su juventud en barcos pesqueros y tras enrolarse en expediciones bélicas, (conquista de Orán), en 1519 se alistó en la expedición de Magallanes a las Indias Orientales al que sustituyó tras su muerte en Filipinas en 1521, y con su buque, la nao Victoria, por la ruta del Cabo de Buena Esperanza, llegó a Sanlúcar de Barrameda (6-IX-1522) siendo el primer Capitán en circunnavegar la tierra. En 1525 murió de escorbuto en plena travesía por el Pacífico. Nada más llegar a la localidad, nos encontraremos con un monumento realizado en su homenaje.
El de Getaria es posiblemente el puerto pesquero con más sabor de Gipuzkoa. Si, sabor en toda su extensión y que es trasladado a nuestros paladares por una cuidada restauración y asadores a pie de puerto. Merece la pena degustar el pescado fresco que se cocina a la brasa en sus calles, acompañado de un buen txakoli, el vino blanco del lugar con denominación de origen. Entre sus estrechas callejuelas que desembocan en el puerto sobresale la iglesia de San Salvador, hermoso templo gótico del siglo XV de planta irregular que se adapta al terreno con cierta pendiente. En su interior se han encontrado numerosos vestigios arqueológicos; sepulturas rectangulares de piedra y también necrópolis más modernas. Considerada una de las grandes joyas góticas del País Vasco, desde 1895 ostenta el título de Monumento Nacional.
Las fiestas tradicionales del municipio se celebran a principios de agosto en honor a San Salvador. No obstante, cada cuatro años, el 7 de agosto, Getaria escenifica el desembarco de Elcano.
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