Bermeo. Corazón de mar
En la falda del monte Sollube, Matxitxako por occidente, Izaro luciendo en la apertura del monumento a Benito Barrueta y Urdaibai por oriente, se planta “Bermeo”, villa con una singular personalidad colmada de mar.
Pesquero por excelencia de la costa vasca, su puerto es corazón y alma, la trainera su deporte, el que levanta pasiones y el nexo la mar a la que desde siempre ha unido su destino. No podría ser de otra manera, gran parte de su ambiente cultural con la mar como epicentro. Desde la ballena que figura en su escudo, antigua fuente de riqueza a el Museo del Pescador, intramuros de la la histórica Torre de Ercilla, declarada Monumento Nacional, uno de los pocos museos dedicado exclusivamente a mostrar a sus visitantes el ámbito, vida, trabajo y técnicas de los pescadores. El casino de Bermeo, con aspecto de palacete francés o la hermosa iglesia de Santa Eufemia, de estilo gótico son otros referentes culturales en esta visita.
La espectacularidad de su costa no te dejará indiferente. A las islas de Izaro y Akatz, al cabo Matxitxako y tan solo a 8 km del centro urbano San Juan de Gaztegulatxe, una de las zonas más visitadas del todo el territorio histórico de Bizkaia, te pondrá la guinda a jornadas plenas de naturaleza.
Las fiestas principales de Bermeo comienzan el día 7 de septiembre, día de Nuestra Señora de Almike, patrona del municipio. En ellas cabe destacar el día del "Arrantzale"-pescador-, donde predomina el mahón. Además, el día de al Magdalena, el 22 de julio, es también un día especial para los bermeotarras.