Pepe Ribes y Alex Pella optan por buscar más viento en las latitudes más meridionales entre las puertas de seguridad
El Estrella Damm, tercero en la Barcelona World Race, ha conseguido durante la noche recortar distancias respecto al líder, el Virbac-Paprec 3 de los franceses Jean Pierre Dick y Loïck Peyron.
El barco español, guiado por Alex Pella (RCN Barcelona) y Pepe Ribes (RCR Calpe), ha promediado casi 18 nudos en la hora anterior al último parte de posiciones, y ha sido el que más distancia a buen rumbo (VMG: Velocity Made Good) ha recorrido entre las clasificaciones de las 5 y las 10 de la mañana hora española, 79 millas, frente a las 74 del Mapfre de Iker Martínez y Xavi Fernández. En las últimas 24 horas el Estrella Damm ha recorrido más millas que ningún otro barco de la flota, 357, una más que su inmediato perseguidor, el Groupe Bel de los galos Kito de Pavant y Sebastien Audigane.
La jornada de hoy es crucial para el barco catalán, que está a unas 600 millas de abandonar el Atlántico y adentrarse en el temible Índico Sur. En su búsqueda de las mejores condiciones de navegación, Pella y Ribes han optado por una táctica audaz, dirigiéndose más al sur que sus rivales en busca de más viento, cuando ya ha pasado el primer punto de la puerta de seguridad del Atlántico, establecida para evitar los icebergs.
Pepe Ribes se mostró satisfecho esta mañana con el rendimiento del Estrella Damm estas últimas jornadas y explicó la táctica escogida para las próximas horas: “Ahora mismo tenemos de 25 nudos del 280 (Oeste-Noroeste) y vamos a rumbo 80 (Este). Sin embargo nuestra táctica hoy es ir más al sur donde hay más viento. Parece que somos los únicos que lo haremos y que todos siguen recto hacia el Este. Delante de nosotros hay una zona de poco viento. Hay más presión abajo. Sin embargo, cuando esa zona de poco viento pase los de más al norte tendrán mejor ángulo que nosotros. Aun así, preferimos no quedarnos encalmados y tener viento constante. Es posible que nos separemos 200 millas de norte a sur con el resto. Es un momento decisivo, pero todos lo son. No estamos pensando en nuestros rivales, sino en navegar lo mejor posible y a la vez ir con cuidado, porque estamos haciendo trasluchadas con 30 nudos, que no es nada fácil”.