Golden Globe Race. El líder hacia Cabo de Hornos, frío, húmedo y desafiante

Falta un largo camino hasta Les Sables d'Olonne, y continúan surgiendo nuevos desafíos para los restantes regatistas de GGR. Simon Curwen mantiene el liderato con un buen margen, pero cualquier cosa puede pasar. Se dirige al sur hacia Cabo de Hornos a 1200 millas con temporales en el horizonte. Debería llegar en los próximos 8 días.

En la Golden Globe Race de 2018, la flota fue barrida por sucesivos temporales en el Océano Austral, como resultado la pérdida de cuatro yates y muchos desarbolados. Por el contrario, para esta edición, ese mal tiempo casi ha desaparecido. Además, el Southern Annular Mode (SAM) está empujando este año los sistemas de baja presión hacia el sur, tanto en el Índico Meridional como en el Pacífico, a unos 55-60°S en lugar de las bajas más frecuentes a unos 45°S. Para los supervivientes del GGR 2022 significa que tienen vientos más suaves al norte de la zona de exclusión.

Simon Curwen (GBR) se está preparando para su mayor tormenta en el Océano Antártico hasta el momento. El Clara/Howden, continúa impresionando con su ritmo constante y su trayectoria perfecta, ahora 1200 millas por delante de sus seguidores más cercanos, está frustrado por perderse las grandes condiciones del Océano Austral. Su ritmo de progreso ha sido mixto hasta la fecha, ¡pero así es la vida de un solitario! La temperatura está bajando rápidamente y está usando todo su equipo para clima frío.
“Race Control informó a Simon el 26 de enero de un sistema profundo de baja presión que se formó sobre la posición de Abhilash el jueves por la mañana, intensificándose y siguiendo directamente la ruta de Simon hacia el Cabo de Hornos con NW 35 nudos de viento, con rachas de 55. Race Control está en contacto regular con Simon a través del dispositivo YB y el teléfono satelital.
Agua por todas partes y ni una gota para beber…

El agua es ahora un problema para la flota. Cada uno debe llevar un desalinizador manual de emergencia, pero será penalizado si lo usa. A medida que pasan los días sin lluvia para reponer las reservas, han comenzado las decisiones sobre el racionamiento. Si no fuera por los percebes, el agua habría sido la razón por la que Jeremy Bagshaw (ZAF) se detuvo en Hobart. Perdiendo la mitad de sus reservas en medio del Atlántico, aterrizó con menos de 45 litros. Michael Guggenberger (AUT) había declarado una escasez de agua antes de Hobart, con 53 días de agua restantes y depende de la botella de refresco de limón para llegar a los trópicos, mientras que Abhilash Tomy (IND) ha estado viviendo con 1 litro por día durante semanas y cocina todos los alimentos en agua de mar. ¡Es posible que no vuelvan a obtener suministros durante unos meses!
“En el último frente meteorológico, estaba lloviznando y solo obtuve dos vasos de agua, lo cual siempre es bienvenido, pero no suficiente. “La tripulación está molesta y exige al menos una porción de arroz cocido en agua dulce al mes, que no estoy seguro de proporcionar. Estoy un poco preocupado por el motín a bordo, pero crucé Bounty Island y ahora estoy menos preocupado”. Abhilash Tomy, BAYANAT
El último en declarar el racionamiento de agua es Ian Herbert Jones (Reino Unido), quien se limita a dos litros diarios, reduciendo sus cafés. Para empeorar las cosas, encontró algo de "materia orgánica" en el agua de su tanque y por el momento ha cambiado a sus bidones: "todavía no me ha matado, pero es hora de que deje de beber eso de todos modos".
Guerra de percebes en curso en los océanos del sur

Ian Herbert-Jones (Reino Unido) no pintó con antiincrustante la línea de flotación del Puffin, está completamente cargada. El espejo de popa y el casco están colonizados por percebes. No pudo hacer nada más que observarlo en Hobart, pero seguirán creciendo y ralentizando el barco. Lo peor es la hélice, que no recibió ningún tratamiento ahora tiene un crecimiento enorme! Todo el espacio entre la quilla y el timón está ahora lleno de percebes. Así que estoy arrastrando una pelota de baloncesto... es una pena porque el resto del casco está bien.

En el Pacífico Sur Medio, a lo largo del límite norte de la zona de exclusión, Kirsten Neuschäfer finalmente ha encontrado las condiciones adecuadas para sumergirse y limpiar el casco de Minnehaha. No es una tarea fácil en mar abierto ya que el mar residual en la calma hace que el barco se mueva peligrosamente. La estrategia de Kirsten fue esperar un poco de viento en mar plano y virar para estabilizar el barco y hacer el trabajo más fácil y seguro.
“Después de encontrar percebes en el timón de mi Hydrovane, me preocupé un poco y descubrí que el lado de babor era como un arrecife: percebes viejos y millones de nuevos. Afortunadamente, el lado de estribor no estaba tan mal. Pasé varias horas limpiando ¾ del casco hasta ahora con el raspador. ¡Fue frío, agotador, pero muy gratificante ver grupos de millones de diminutos percebes hundirse en las profundidades!”

Buceó 3 horas el viernes 20 limpiando, luego otras 2 horas y finalmente 3 horas el jueves 26. Para su horror, encontró pequeños percebes nuevos que crecían rápidamente, 4 veces más grandes que la semana anterior. La mayor parte del casco está limpio a excepción de partes del timón y la popa. Es probable que esta lucha continúe en los próximos meses. Tanto Kirsten como Jeremy culpan del rápido crecimiento a aguas más cálidas y velocidades lentas.
¡El desafío de la clase Chichester!
Un participante obligado a detenerse en el GGR pasa a la Clase Chichester y ya no está en la clasificación. Navegan a casa con la flota para completar una circunnavegación de una parada. Guy Waites (GBR) se detuvo en Ciudad del Cabo para limpiar casco y también Jeremy Bagshaw (ZAF) en Hobart. Ambos regatistas explicaron lo difícil que fue volver al “modo solitario” como un “regatista de Chichester” después de estar en tierra durante unos días. Encontrar la motivación para impulsar la velocidad y el rendimiento cuando ya no se compite contra los demás en la flota es difícil.
Ambos habían registrado algunas de las mejores velocidades de la flota después de limpiar sus barcos, y Guy obtuvo la mejor velocidad de 4 horas, 24 horas y distancia de 7 días de los últimos 30 días. Mientras tanto, Jeremy está haciendo la salida más rápida del mar de Tasmania hasta la fecha alejándose de Puffin. Lo más importante es que ambos subrayan el placer que tienen de navegar de nuevo en lugar de arrastrarse.
¿Qué le sucede a Guy Waites el 31 de enero?
A pesar de registrar la mejor distancia de 7 días de la flota de los últimos 30 días, durante una sucesión de vendavales del oeste y alta mar, Guy Waites (GBR) no llegará a tiempo a la puerta de Hobart. Según el Aviso de regata 2.7.2 'Puerta de Hobart', cualquier participante de la Clase Chichester que llegue después del 31 de enero de 2023 será retirado del evento.
Guy es muy consciente de la situación desde que salió de Ciudad del Cabo y ha comunicado a Race Control que continuará hasta el Cabo de Hornos, en contra de la directiva de la GGR, sin detenerse en Hobart para asegurar un paso rápido por el Cabo de Hornos, su gran objetivo.
Como resultado, Guy será retirado del evento tan pronto como pase 147º Este, la longitud de Hobart. El proceso de transición de GGR para su retiro del evento requiere que el equipo de Guys asuman oficialmente toda la responsabilidad de seguridad con el siguiente plan de acción:

EPIRB: el primer punto de contacto se cambiará de GGR Race Control a la gerente de Guy, Julie Waites.
MRCC: GGR Race Control actualizó a MRCC Australia (Maritime Rescue Coordination Centre) y MRCC Chile con respecto al nuevo primer punto de contacto y su retiro del evento. Seguimiento YB: Guy será eliminado del rastreador GGR después de la longitud de Hobart. Su propio rastreador YB estará disponible después de Hobart y se compartirá en su página.
Tweet y llamadas: GGR Race Control detendrá las llamadas semanales y los mensajes de texto diarios, pero ocasionalmente puede publicar o volver a publicar mensajes de sus canales de redes sociales como se hace con otros participantes retirados.

Las Reglas de GGR requieren que todos los participantes se detengan en Hobart si no pueden pasar por la puerta antes del 31 de enero. (Pueden zarpar nuevamente en diciembre de 2023). Una salida en febrero aumenta considerablemente el riesgo de vendavales otoñales que rodeen el Cabo de Hornos en abril, especialmente si el tránsito por el Océano Antártico es lento.