El cántabro Fidel Turienzo, tercero en las 500 Millas en solitario de la MINI MAI
Ha sido su primera participación en una prueba de ese tipo.
El cántabro Fidel Turienzo ha superado con brillante nota su primera participación en una regata de navegantes en Solitario, al haber conseguido a bordo del ‘Satanás’, la tercera plaza en la división de prototipos, en la Mini Mai, celebrada sobre un recorrido de 500 millas a lo largo de diferentes puntos de la costa de la Bretaña francesa, con salida y llegada en La Trinité sur mer.
El navegante nacido en Camargo, ha sido uno de los pocos participantes que ha conseguido concluir la prueba, que fue especialmente dura al soplar vientos de más de 40 nudos de intensidad durante alguna de las jornadas, y que provocaron el abandono de un total de 25 barcos, de los 37 que participaban en la prueba.
Con su tercer puesto en la clase proto, el joven cántabro consigue dar un paso adelante hacia su gran objetivo, que no es otro que participar el próximo año en la Minitransat reservada a veleros de 6.50 metros de eslora y hacerlo a bordo del ‘Satanás’, el antiguo mini de Gonzalo Botín que ha remozado ahora Fidel para cumplir su sueño.
Fidel ha sido una de las grandes sensaciones en la prueba disputada la semana pasada, en una disciplina que es ampliamente seguida en Francia, cuna de los grandes navegantes solitarios. Hasta ahora únicamente dos deportistas cántabros han conseguido cumplir el sueño de hacer la Ministransat, Guillermo López-Alonso a bordo del ‘Cañamín’, en el año 1977, y en la que cruzó la llegada en segundo puesto, y Gonzalo Botín, a bordo del ‘Don Vito’, en 2003.
El entrenador profesional de vela, y que destacó en vea ligera en las clases Optimist y posteriormente en 420, cuenta con el apoyo de Cruz Marina en este difícil arranque de la competición de solitarios, y también con la ayuda de Javier Cifrián, con el que ha participado el pasado mes de abril en la Pornichet Select 6.50 para tripulaciones a dos, y en la que fueron séptimos.