El Estrella Damm recorta al líder y es cuarto, con el Groupe Bel a menos de seis millas
La lucha en la cabeza de la flota de la Barcelona World Race no da un respiro a los patrones. El grupo de perseguidores del líder, el francés Virbac-Paprec 3, le ha recortado millas merced a la complicada situación meteorológica por la que éste ha atravesado y a los vientos constantes de componente sur que les han impulsado en dirección al próximo paso obligatorio, la puerta de Crozet.
La intensidad de esta batalla tiene su punto fuerte entre la tercera y la cuarta plaza, donde el barco francés Groupe Bel y el español Estrella Damm están en un empate técnico con apenas seis millas de separación entre ellos. El barco catalán, patroneado por Alex Pella (RCN Barcelona) y Pepe Ribes (RCR Calpe), ha cedido esta noche la tercera plaza al francés. Sin embargo, en las últimas diez horas la buena velocidad media del Estrella Damm, cerca de los veinte nudos, está añadiendo emoción a lo que se ha convertido en un duelo apasionante para los seguidores de la vela oceánica.
Esta lucha cobra relevancia cuando se conocen las condiciones en que navegan estos dos IMOCA Open 60. “La noche ha sido movidita y el día también lo está siendo”, afirmó Pepe Ribes esta mañana. “Desde anoche tenemos treinta nudos de través, del sur, y navegamos a una media de veinte”, prosiguió. “Es muy incómodo, con agua por todas partes, y cuesta dormir con tanto movimiento”, explicó. “Volvemos a andar a cuatro patas”, aseguró el patrón de Benissa (Alicante) quien hace unos días explicaba que era el único modo de moverse con cierta seguridad en el interior del barco, donde no se ven venir las olas.
Un cuerpo a cuerpo a ciegas
Treinta nudos de viento y olas de diez metros convierten la seguridad y el cuidado del barco en algo prioritario, por encima de la velocidad. Se debe, por lo tanto, reducir superficie de vela: “Vamos con la trinqueta y tres rizos. Ahora lo importante es no romper nada y hay que frenar un poco, porque aquí, en estas condiciones, es fácil romper. Pero de momento todo bien a bordo, y que siga así”, explicó Ribes.
Pese al cuerpo a cuerpo con sus rivales del Groupe Bel, el fuerte oleaje impide el contacto visual: “No vemos al Groupe Bel porque aunque están cerca, con estas olas tan grandes es muy difícil”, afirmó Ribes.