Arkea Ultim Challenge-Brest.: ¿Cómo dormir bien en una carrera ULTIM en solitario?
"Para aguantar la distancia, a largo plazo hay que comer bien y dormir bien", reitera Charles Caudrelier. La semana pasada hablamos de alimentación, esta semana es el sueño el tema de debate. Es imposible dormir ocho horas seguidas cada noche. Dormir bien es una batalla en sí misma. Como muchas otras cosas, requiere una preparación técnica y psicológica. Puede ser un equipo específico, alarmas, trabajar con apneístas. La gestión del sueño se ha convertido desde hace tiempo en una cuestión de rendimiento.
Esta información también podría ayudar a todos los insomnes, a los que se levantan por la noche y no pueden volver a dormirse, a todos los que tienen dificultades para pasar una noche entera de un tirón. Los navegantes en solitario no tienen elección. Cuando salieron hace dos domingos, el 7 de enero, pasaron a dormir siestas de una duración que oscilaba entre unos minutos y 90 minutos".
Armel Le Cléac'h explica. "Lo que intentamos es dormir con la mayor regularidad posible cinco, seis, quizá siete veces de forma acumulativa a lo largo de 24 horas en incrementos de 30 a minutos a 1 hora 30".
La regla de oro es no esperar, aprovechar cada oportunidad. "En cuanto las condiciones son buenas, hay que dormir".
"Al principio, estás en plena forma durante unas 48 horas, pero inevitablemente, a medida que gastas energía, entras en déficit de sueño", explica Sébastien Josse, miembro de la unidad de ruta de Banque Populaire y copatrón de Armel en la Transat Jacques Vabre. "Luego te echas la siestecita, te despiertas para comprobarlo todo y, si es posible, te vuelves a dormir". Así es posible acumular hasta 6 u 8 horas de sueño.
Técnicamente, la mayoría de los patrones han probado equipos para encontrar las soluciones más adecuadas
Armel Le Cléac'h tiene instalado un colchón a medida en su copkit. En Sodebo, nos cuentan que Thomas Coville realizó "muchas pruebas para encontrar los cojines más adecuados". El ocho veces patrón de la vuelta al mundo tiene "un cojín gigante para el cuerpo, otro para el cuello y otro para las rodillas". Coville también utiliza una venda en los ojos durante sus siestas.
Apnea (suspensión de la respiración) para "superar tus límites y alcanzar un nuevo hito".
Así pues, hay ganancias, pero también un aspecto psicológico vinculado al sueño. Desde el comienzo de esta regata, los regatistas han confirmado en general que han dormido bien, aunque les costó asentarse durante los primeros días y las primeras noches. Pero a través de los mensajes y las conversaciones, todos han confirmado que llevan un buen ritmo. Pero para conciliar un sueño profundo y reparador es importante alcanzar un estado de liberación, de relajación, de dejarse llevar, de estar lo más relajado posible. Para conseguirlo, Thomas Coville trabajó con una apneísta, Alice Modolo. Y lo mismo hizo Charles Caudrelier, que trabajó con Arnaud Jerald, poseedor del récord de apnea (122 metros).
Jerald nos cuenta: "Charles quería desconectar siempre que pudiera del barco, de los números y del estrés, de toda la información de la que debe estar pendiente. Quería poder elegir. Sin embargo, en apnea, sólo se trata de sentir. Empezamos trabajando la respiración para bajar el ritmo cardíaco y empezar a dejarse llevar".
Sobre todo, la experiencia de la apnea (suspender la respiración) ayuda a avanzar mentalmente. Al final del trabajo conjunto con Jerald, Caudrelier quería llegar a los 30 metros: tuvo que esforzarse mucho, incluso reducir la velocidad a 25 metros antes de llegar al límite. "Es una forma de superar los propios límites, de pasar un hito como un punto de inflexión", asegura el apneísta. "Al lograrlo, se gana experiencia, se abre otra vía".
La experiencia ayuda....
Sin embargo, "en momentos de estrés volvemos a recurrir a la experiencia". Todo lo que los navegantes han aprendido previamente sobre su sueño, los días y las noches gestionándose a sí mismos, luchando contra sí mismos en la Solitaire du Figaro, en transatlánticos, todo ayuda "Cada navegante tiene su propia manera de conciliar el sueño", dice el ocho veces regatista de la Solitaire Anthony Marchand (Actual Ultim 3) antes de la salida. ¡Es muy importante conocerse bien a uno mismo! "
Pero cuando el cuerpo está realmente estresado y demasiado cansado, cuando el cursor está en números rojos, es justo el momento en el que hay que extremar la vigilancia. Porque después de varios días realizando maniobras o enfrentándose a condiciones difíciles, como durante el paso del frente a mediados de la primera semana, no es raro tener una caída, o lesionarse por falta de energía. O quedarse dormido.
Así que todo el mundo toma precauciones, incluida la de poner una alarma.
"Es muy potente, muy estridente", explica Sébastien Josse. "El problema es que a veces estás tan cansado que acabas integrándola en tu sueño y terminas esperando de 5 a 10 minutos antes de responder a ella".
Los patrones saben que se puede perder una regata por despertarse demasiado tarde. Todo el mundo recuerda aún la desventura de Alex Thomson en la Route du Rhum 2018: a pocas millas de la meta, no le despertó su reloj de pulso eléctrico (al que se le había estropeado la pila) y se fue contra un acantilado.
Pero el cuerpo tiene una gran capacidad de adaptación y la gestión del sueño a bordo es una prueba de ello. "Por supuesto, a veces te despiertas y necesitas unos segundos para recordar dónde estás, a bordo, en regata, con tal o cual configuración de velas y tal o cual velocidad", explica Sébastien Josse. "Pero la mayoría de las veces, te despiertas justo antes de la alarma. Eso es lo que hace que no estés demasiado quemado cuando te despiertas... Y ésa es la magia de la experiencia, de conocerte a ti mismo y tus límites".