Trofeo Ciudad de Tarragona de pesca subacuática
El domingo 9 de noviembre se disputó, en la escollera del puerto de Tarragona, el clásico concurso de pesca submarina Ciudad de Tarragona.
Esta competición, organizada por el club deportivo federado Sociedad de Exploraciones Submarinas de Tarragona (SES), cuenta con la colaboración de la Cruz Roja y el apoyo de la Federació Catalana D’Activitats Subaquatiques (FECDAS). La puntuación obtenida del peso de las capturas determinó en esta ocasión la clasificación de este certamen deportivo.
El campeón absoluto, Eloy Martínez del club SES de Tarragona, consiguió veinte piezas y un total de 18.870 puntos. El segundo clasificado, Jaume Andreu, del club CAVALLDEMAR de Barcelona, se hizo con doce piezas y 10.535 puntos. El tercer puesto fue para Ignacio de la Fuente, del club CASEP del Prat de Llobregat, con diez piezas y 7.165 puntos. David Cueto, del club SES, con 7.100 puntos y José Maria Rodríguez, del club CAVALLDEMAR, con 6.340 puntos quedaron en cuarta y quinta posición respectivamente.
Las piezas más capturadas fueron zarpas, sargos, serviolas, lisas, tordos y sargos picudos. El mero de 3,030 Kilogramos le valió a Eloy Martínez para conseguir el premio a la pieza mayor.
En la categoría de debutantes hubo una gran participación por parte de todos los clubs federados de Cataluña. El mejor en esta categoría ha sido José Andrés Cabrera, del club DOFI-SUB; el segundo puesto lo consiguió Javier Fernández del club SES, y el tercero ha sido para Albert Llaó del club CASEP.
En la categoría de veteranos, el ganador fue José Maria Rosillo del club CASEP, Moisés Paredes del club SEDES quedó en segundo lugar y Joan Adell del club SES consiguió la tercera posición.
En esta competición, los deportistas capturaron de forma selectiva, respetando el reglamento de la Federació Catalana d’Activitats Subaquàtiques (FECDAS) y la talla mínima de reproducción. Haciendo compatible la realización de este tipo de campeonato cerca de reservas marinas, en este caso el Parque Subacuático de Tarragona, ya que los propios deportistas son los primeros en respetarlas para conservar de esta forma su actividad recreativa.