La UE, un poco más cerca de la prohibición total del cercenamiento de aletas
La Comisión de Medio Ambiente endurece la propuesta de la Comisión Europea
Oceana elogia la decisión de la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria del Parlamento Europeo, que hace unos minutos ha votado a favor de reforzar la prohibición del cercenamiento de aletas de tiburón (finning). Aunque el finning está técnicamente prohibido en aguas europeas y a los buques de la UE, las lagunas de la legislación hacen que la aplicación de ésta sea extremadamente difícil. El Parlamento Europeo debate en la actualidad una propuesta para que todos los tiburones sean desembarcados con las aletas adheridas.
“La Comisión de Medio Ambiente ha sumado su voz a la de científicos internacionales y expertos que admiten que el único medio para asegurar la erradicación del finning es desembarcar los tiburones con las aletas adheridas de forma natural”, afirma Xavier Pastor, Director Ejecutivo de Oceana Europa. “El Consejo Europeo ya ha mostrado su apoyo a la prohibición, y confiamos en que la Comisión de Pesca y el resto del Parlamento sigan su ejemplo para rellenar las lagunas de una legislación que es imperfecta”.
El cercenamiento de aletas –práctica que consiste en cortar las aletas del tiburón y arrojar el cuerpo al mar– viene motivado por el alto valor que alcanzan las aletas en el mercado internacional frente al relativamente bajo de la carne. Aunque el finning se prohibió teóricamente en la UE en 2003, algunos países conceden permisos especiales de pesca que permiten a los barcos separar las aletas a bordo, siempre y cuando conserven aletas y carne y las aletas desembarcadas no superen el 5% del peso en vivo de los tiburones capturados. Esta ratio, una de las más benévolas del mundo, se suma a otra laguna legal que permite desembarcar aletas y cuerpos por separado, lo que dificulta enormemente el seguimiento.
Cada año, el mercado internacional comercializa aletas de hasta 73 millones de tiburones. Tomados en su conjunto, los países de la UE son número uno en capturas de rayas y tiburones, con el 16% de las capturas declaradas de estas especies en 2009.