Oceanografía prevé un periodo largo de sucesivas oleadas
Índice del artículo
- Caso Prestige
- Con técnicas biológicas la limpieza duraría unos meses
- Ejemplo en Alaska
- ¿Hablan todos del mismo fuel?
- Expertos galos estudian la persistencia del fuel en la fauna
- Oceanografía prevé un periodo largo de sucesivas oleadas
- "Prestige": tres oficiales de marina defienden el trasvase
- Navegando sobre el fuel
- Es una catástrofe en el ecosistema
l director del Instituto Español de Oceanografía del Ministerio de Ciencia y Tecnología, Alvaro Fernández, manifestó ayer en Palma de Mallorca que "no hay nada que avale que el fuel-oil vertido por el petrolero Prestige vaya a solidificarse en el fondo del mar o que vaya a seguir con su rastro contaminante."
Alvaro Fernández, que reconoció que la gran preocupación de los expertos es que el fuel que se encuentra en el fondo del mar aflore a la superficie, estima que es imposible vaticinar la evolución de un problema sobre el que "no hay una experiencia previa" y del que sólo "existen teorías". El director del Oceanográfico advirtió sin embargo de que, en el caso de que el fuel del prestige no se solidifique, puede generarse "un período muy largo de sucesivas oleadas de marea negra".
Álvaro Fernández, que asistió ayer en Palma a la firma de un convenio con la Universidad de Baleares, manifestó a los periodistas presentes que "las costas gallegas y su ecosistema tardarán años en recuperarse", aunque matizó que el perjuicio será diferente entre especies de "nadadores activos" como los peces, que pueden intentar huir del avance de la mancha contaminante o las que viven en las rocas, como los percebes o los mejillones.
Según relató Fernández, el Instituto de Oceanografía trabaja activamente en el análisis del problema y tiene previsto que el barco Cornide de Saavedra, actualmente en el Golfo de Cádiz, se desplace a la zona afectada el 7 de diciembre, para estudiar los efectos de los hidrocarburos en las aguas gallegas.
Los resultados de estas muestras serán comunicados, indicó, "a las autoridades que deben decidir la prohibición de la pesca y el marisqueo para que adopten las medidas más adecuadas".
Esta es la hipótesis que maneja por el momento el Instituto de Oceanografía, que estudia en estos días las corrientes marinas para tratar de predecir adónde puede llegar la mancha del vertido, que se liberó al partirse el buque y que actualmente se encuentra a la deriva en aguas del Atlántico.
La constatación de que el fuel oil manche de nuevo la Costa de la Muerte dependerá de que los vientos sigan soplando en la misma dirección durante las próximas horas. Fernández también expuso que la investigación se completará con la actuación del minisubmarino Nautilus y del buque oceanográfico Atlante, que depende del Ifremer, organismo homólogo en Francia del Instituto Español de Oceanografía.
El Nautilus analizará el estado del casco hundido del Prestige y la situación del combustible, que todavía puede "generar un periodo muy largo de sucesivas oleadas".
Los servicios del Instituto Español de Oceanografía se mantienen en estado de alerta y que consideran que "el peor de los escenarios sería la llegada de la mancha a las Rias Bajas".