Las comunicaciones ópticas aprenden de los gusanos marinos
Un grupo coordinado de científicos pertenecientes a Gran Bretaña y Australia han declarado recientemente que los sistemas fotónicos de alta tecnología del futuro se podrían beneficiar de los recientes descubrimientos realizados en un pequeño gusano que habita en el fondo del mar.
Aunque se conoce poco sobre esta criatura, cuando se ha comenzado a ver las propiedades de las espinas que recorren su cuerpo, la comunidad científica ha quedado gratamente sorprendida.
El animal en cuestión responde al nombre de Afrodita o “ratón marino” y se caracteriza por tener unas espinas a lo largo de su cuerpo que en estado normal tienen un color rojo intenso. Lo que se ha descubierto es que cuando la luz cae de forma perpendicular al eje de la espina, aparecen tiras de diferentes colores, concretamente verde y azul.
Tal como lo han expresado los científicos en la revista Nature: “La estructura simple responsable de este efecto es un ejemplo remarcable de ingeniería fotónica por parte de un organismo vivo”. La fotónica es la parte de la óptica que estudia el control de los fotones, o las partículas elementales que componen la luz.
Otro ejemplo de una entidad fotónica en la naturaleza es el cristal que forma el ópalo, aunque no parece ser tan sofisticado como este gusano marino. El estudio concluye con la esperanza de poder aplicar estos nuevos conocimientos en el futuro: “Estas estructuras podrían tener una aplicación en las comunicaciones fotónicas, donde hay mucho interés en fabricar fibra de cristal fotónico que presente una morfología similar