OCEANA REÚNE NUEVAS PRUEBAS DE QUE EL BÁLTICO SE ENFRENTA AL COLAPSO SI NO SE TOMAN MEDIDAS EFECTIVAS Y URGENTES
La organización difunde nuevas imágenes de áreas con una gran biodiversidad y otras devastadas por la ausencia de medidas de protección y prácticas de pesca destructiva, como el arrastre de fondo
Expertos de Oceana presentan en Copenhague los primeros resultados de la expedición
Oceana ha presentado esta mañana imágenes nunca vistas hasta ahora de los fondos marinos del Báltico y que resaltan el fuerte impacto de las prácticas de pesca destructiva y de la contaminación del medio marino. La organización internacional de conservación marina, que actualmente lleva a cabo una expedición para documentar el estado del área con un equipo de científicos, buceadores profesionales, cámaras submarinos y un robot submarino (ROV), reclama la implantación urgente de medidas de protección.
Las imágenes revelan el extremadamente dañado estado de este mar y sirven para recordar a las autoridades que no se puede retrasar más la implantación de medidas que frenen la degradación del ecosistema del Báltico de los impactos de la contaminación, la sobrepesca o las prácticas destructivas como el arrastre de fondo y el dragado.
“Algunas de las fotografías y de los vídeos de ROV son alarmantes. Hemos visto áreas en las que la mayor parte de las formas de vida han sido destruidas. Pero también hemos encontrado algunas otras con una gran biodiversidad y, de acuerdo a las evidencias en otras partes de Europa y del resto del mundo, estas áreas podrían recuperarse si se crease una red de Áreas Marinas Protegidas efectivas y correctamente gestionadas” afirma Xavier Pastor, Director Ejecutivo de Oceana Europa y líder de la expedición. “Está claro que los gobiernos tienen que implantar de forma urgente medidas de gestión si queremos evitar la destrucción del mar Báltico”.
Oceana solicita una mejor gestión de los recursos del mar Báltico, incluyendo las pesquerías y una mejor gestión de las áreas ya designadas. Actualmente en torno al 12% del Báltico se encuentra bajo alguna figura de protección, aunque no existen planes y medidas adecuadas de gestión. Es necesaria además la ampliación de la red de áreas marinas para asegurar que los últimos ecosistemas funcionales son protegidos. Oceana solicita la prohibición del arrastre de fondo para proteger la biodiversidad y apoya el cierre de áreas a la pesca. Esto no solo beneficiaría a los ecosistemas del Báltico, si no que de acuerdo a diferentes estudios, también beneficiaría a la pesca comercial debido al aumento de capturas en las zonas contiguas.
“Las especies y hábitats amenazados tienen que ser protegidos con medidas de gestión estrictas y la prohibición de actividades destructivas como el arrastre de fondo y el dragado. Los ecosistemas del mar Báltico tienen que recuperarse y alcanzar un status medioambiental óptimo antes de 2020, tal y como establece la legislación,” afirma Anne Schroeer, Jefe del Proyecto de Oceana en el Báltico. “Nuestras investigaciones muestran cuál sería el estado del Báltico si se restaurase el equilibrio del Báltico, y la situación a la que llegaría si los países ribereños no cumplen con sus obligaciones.”
A lo largo de las últimas cuatro semanas Oceana ha documentado la biodiversidad del Báltico y las amenazas al ecosistema, analizando las aguas danesas y suecas, incluyendo el Kattegat, Oeresund y el litoral sueco. El equipo de científicos, buceadores y fotógrafos ha documentado numerosas comunidades amenazadas, como las de veretilos o macrofitas, al igual que los arrecifes de mejillones, que forman importantes lugares de alimentación y cría para muchas especies. En estos lugares se han documentado especies comercialmente importantes pero actualmente amenazadas como el bacalao (Gadus morhua), el merlán (Merlangius merlangius) y diferentes peces planos (Limanda limanda, Pleuronectes platessa).
La expedición de Oceana a bordo del Hanse Explorer continuará hasta el 4 de junio de 2011. Los hallazgos finales, junto con las recomendaciones y las propuestas concretas de áreas marinas protegidas, se publicarán en otoño.