Industria petrolera recibe duro ataque por peligros en el lecho marino
Los grandes montículos de estructuras desechadas a raíz de la limpieza de las plataformas petrolíferas están suponiendo un serio riesgo para los pescadores comerciales y sus aparejos de pesca en el Canal de Santa Bárbara y justo al norte de esa zona, en California, según una coalición de organizaciones de pescadores.
La Federación de Asociaciones de Pescadores de la Costa del Pacífico (PCFFA) manifestó esta semana que los montículos, que al parecer están contaminados con lodo y materiales que contienen compuestos de las plataformas petrolíferas, llegan a medir hasta 24 pies de altura y enganchan las redes y palangres de los pescadores, causando un gran daño. Además, constituyen una amenaza para los pescadores comerciales, que quieren restablecer las pesquerías tradicionales en la llamada área 4H.
El director ejecutivo de PCFFA, Zeke Grader, dijo que ningún buque se había volcado aún debido a los grandes montículos, pero se han llegado a enganchar incluso los cerqueros que se dedican a capturar caballa, anchoa y sardina.
Grader señaló que era responsabilidad de la compañía petrolera Chevron, que se comprometió a limpiar todos los equipos de las plataformas, retirar estas estructuras y otros materiales que quedaron en el fondo del océano. Eso incluye los cuatro grandes montones de estructuras extraídas de las plataformas Hazle, Heidi, Hilda y Hope, pertenecientes a esta compañía petrolífera.
Situados en una zona de aguas relativamente poco profundas, se estima que los montículos miden hasta 200 pies de ancho. El fondo oceánico de la zona es arenoso y apropiado para las redes de arrastre, y antes de la instalación de las plataformas petrolíferas, esta área era conocida por su buena pesca de platija, fletán y lenguado.
PCFFA sostiene, además, que el Registro de Boyas en los Montículos de Estructuras en 4H de Chevron indica que las boyas son un medio ineficaz de mitigar los peligros de seguridad causados por los montones de estructuras que permanecen en la zona seis años después de que las platarformas han sido retiradas.
La federación señala que la Comisión Costera de California y la Comisión de Terrenos del Estado (SLC) ordenaron el año pasado a Chevron que modificara su plan de abandono de 4H, aprobado anteriormente.
Grades apuntó en una declaración emitida esta semana que, desde el punto de vista de los pescadores, los argumentos presentados para intentar permitir a las compañías petroleras dejar plataformas en pie y volcadas como arrecifes artificiales y nuevos hábitats para los peces no son válidos. Dijo que las áreas nunca fueron "desiertos" marinos, como han señalado algunas compañías, sino que han aportado una buena pesca y no necesitan ser "mejoradas".
Lo mejor, dijo, sería que dichas áreas fueran restablecidas, acercándose lo más posible al nivel natural que presentaban antes de que fueran instaladas allí las plataformas y se empezaran a utilizar distintos tipos de materiales para ayudar en las tareas de perforación. Ese material, que incluye diesel e hidrocarburos, sigue contaminando los tubos de las estructuras y volviéndolos potencialmente tóxicos, señaló Grader.
PCFFA teme que puedan incluirse metales pesados como el mercurio. "Estamos intentando que se lleven a cabo análisis en estas zonas", dijo, haciendo referencia al hecho de que las plataformas datan de la década de los 50 y 60, fecha en que no se llevaban a cabo controles ni pruebas del daño medioambiental que causaban estas estructuras.