«En el caladero gallego hay sobrepesca»
Veinte años después, el Instituto Oceanográfico de A Coruña acaba de recuperar al director que le conoció cuando aún carecía de sede definitiva. Miguel Torre Cervigón, biólogo coruñés hijo de coruñeses, se ha fijado una meta nada más pisar el centro: recuperar el volumen de actividad y el prestigio que la institución tenía en 1981 y situarlo a la cabeza de la investigación española. Quizá por «deformación profesional» -colaboró en la redacción del plan marisquero de Galicia-, cree que la experimentación en acuicultura puede dar mucho más de sí y subraya que el problema del litoral gallego es la sobrepesca.
Torre Cervigón vio a su enemigo al entrar en el Oceanográfico: la falta de espacio que pone en serio peligro su capacidad de crecimiento. -¿Qué ha cambiado en veinte años? -Sobre todo, el equipamiento y la parte administrativa de apoyo a la investigación. -¿Y el apoyo económico? -Aún estoy tomando tierra, pero supongo que, como ocurre en otras áreas de estudio, la financiación no será boyante. Espero que la adscripción del Oceanográfico al Ministerio de Ciencia y Tecnología sea un cambio positivo que logre mitigar la falta de recursos. De todos modos, no hay más que ver las estadísticas para saber que la inversión está muy por debajo de esos países europeos a los que nos queremos equiparar. -¿Es caro este campo de la investigación? -Según estudios realizados en Estados Unidos, después de la espacial, la investigación oceanográfica es la más cara. Para realizar estudios pesqueros, se necesita mover barcos y contratar tripulaciones y eso es costoso. Ahí está el Vizconde de Eza en Terranova, la base en la Antártida... Es, desde luego, una actividad cara. -¿Está especializado el centro coruñés? -Desarrolla proyectos en las tres áreas, que son pesquerías, acuicultura y medio ambiente marino, pero el Oceanográfico de A Coruña se hace fuerte en este último campo. -¿Cuál es el «diagnóstico» del litoral gallego? -Bueno y la prueba es que la mayoría de las playas gallegas tienen bandera azul. Los puntos negros son los puertos, donde habría que poner remedio a los vertidos que se producen. Pero el litoral está sano, de ahí que el marisco gallego siga manteniendo su prestigio. -Pero peces no hay. -Ese es un problema de sobrepesca, no de contaminación. Se captura a un ritmo mayor del que aconseja la reproducción de las especies. La solución pasa por reducir el esfuerzo pesquero, sea eliminando barcos, limitando su potencia o poniendo cuotas. Los políticos prefieren las medidas menos traumáticas, de ahí que impere el sistema de topes. -El sector sospecha que las cuotas no atienden a informes científicos. -Creo que está en un error. La UE pide informes, pero los políticos no pueden ignorar cuestiones socioeconómicas. Hay muchas presiones y, por eso, no se pone remedio tajante a la sobrepesca