Ría y puerto de O Barqueiro. Costa cantábrica gallega. Mañón. A Coruña
El puerto de O Barqueiro se encuentra en el término municipal de Mañón.
O Barqueiro, con sus caseríos abrazando su pequeño puerto, es una de las más típicas estampas del litoral gallego de las Rías Altas.
El origen de su nombre proviene del barquero que trasladaba a personas y mercancías de uno a otro lado de la ría hasta el año 1901, en que se terminó el puente metálico que vemos hoy.
Su puerto de pequeñas dimensiones consta de una dársena donde tienen su base pequeños pesqueros.
Tiempo atrás también se cargaba aquí, y en una rampa junto al antiguo puente, el mineral de caolín destinado a las cerámicas andaluzas.
O Barqueiro pertenece al concello de Mañón, que ocupa una larga franja entre las provincias de Lugo y A Coruña así como la vertiente occidental del río Sor, que con sus afluentes surcan profundos valles, de abundante y apretada vegetación, en contraste con las zonas más altas en las que predomina la vegetación arbustiva.
Sus principales alturas se encuentran dentro de A Faladoira. (605m) en A Cruz de la Palloza (523m) y en A Coriscada, descendiendo según nos aproximamos a la costa.
Cerca del mar se alza el Facho da Meda uno de los mejores miradores sobre la ría y el antiguo semáforo de Bares.
La vista panorámica de la ría y de la costa lucense hasta Viveiro es de gran belleza y espectacularidad, así como la visión del océano con Ortegal al fondo.
El principal atractivo turístico del municipio es el que le proporciona la naturaleza, tanto la montaña, por la que se puede practicar el senderismo, como el turismo de playa en los magníficos arenales de Bares y Esteiro.
La pesca tanto continental como de mar es el otro gran reclamo.
Los cotos trucheros y de reo de Segade y de Ribeiras del Sor son frecuentados por muchos pescadores durante la temporada. Entre costa y montaña, aprovechando los recodos del río Sor, se encuentran varias áreas recreativas, aulas de naturaleza y refugios de pescadores con un encanto especial.
Gastronomía: sin duda, como en Bares, es obligado pedir Peixe (pescado), el que dispongan las instalaciones de restauración de la zona, un plato exquisito que nos ofrece un Cantábrico que termina en un paraje inolvidable.