Cádiz, la ciudad más antigua de Europa occidental
Bautizada por Lord Byron como «Sirena del Océano» y conocida popularmente como la «Tacita de Plata» habitada por 116.979 habitantes (2018 INE), es la ciudad más poblada de la bahía que lleva su nombre. La ciudad se sitúa frente al estuario del río Guadalete, e inmersa en el Parque Natural de la Bahía de Cádiz.
Su economía está basada, principalmente, en el sector del comercio, industrial con presencia de importantes astilleros, actividad de sus zonas portuaria y Zona Franca y el turismo, bastión actual de su economía por su entorno natural, al importante patrimonio histórico que posee y sus fiestas locales principalmente su carnaval, precursor del fino gracejo gaditano y continuación con sus chirigotas de aquella tonadilla que dice “Con las bombas que tiran los fanfarrones, se hacen las gaditanas tirabuzones". Como dato negativo, Cádiz es la provincia española con más nivel de desempleo de alrededor de un 30% de paro.
La historia tiene en Cádiz episodios de gran influencia… sus restos arqueológicos datados en 3100 años así nos lo recuerdan. Las guerras púnicas, la romanización de Iberia, descubrimiento y conquista de América y más próximos como la instauración del régimen liberal en España con su primera constitución, y su influencia posterior para las constituciones de las ex-colonias españolas. Cádiz es auténtica alusión de ello en muchas de sus plazas, jardines, iglesias y emplazamientos.
De Cádiz se pueden destacar muchas cosas: sus playas y sus fiestas, su rica historia, ya que Cádiz es considerada la ciudad viva más antigua de occidente, su patrimonio artístico y monumental, y en cuanto a ocio, sin duda el acercarse al Barrio de La Viña o el Barrio del Pópulo siempre con ambiente de cañitas, vino y tapeo.
Cádiz se está configurando como un gran centro de turismo cultural y urbano.
Ciudad ideal para recorrer a pie su casco antiguo a un lado y el otro del Atlántico. Plazas y más plazas, entre callejuelas empedradas con coloristas y evocadoras fachadas que rematan en parques o castillos donde impera la mar.
Partimos de la Puerta de Tierra, reducto de la que fuera muralla de entrada a la ciudad en dirección a la Plaza San Juan de Dios y el Ayuntamiento, dejamos atrás la antigua Fábrica de Tabacos (hoy Palacio de Congresos). A la izquierda del Consistorio, el Barrio de Santa María , cuna del flamenco, calles que suenan a soleares, bulerías y otros palos del cante.
Si entramos por el Arco de los Blancos llegaremos al vecino Barrio de El Pópulo, de no más de ocho calles empedradas pero bien apañadas y con locales de ambiente para la tarde noche.
La barroca Casa del Almirante, el Archivo de Indias , el Arco del Pópulo.
A escasos metros pasado el callejón Piratas llegamos a la Plaza de la Catedral, que alberga el edificio de la Catedral Nueva, también llamada Santa Cruz sobre el Mar aunque los gaditanos la denominan Catedral Nueva de estilo barroco, rococó y neoclásico, construida entre 1722 y 1823. Tiene planta de cruz y tres naves. El altar mayor neoclásico dedicado a la Inmaculada Concepción. Su cúpula semi esférica está flanqueada por dos torres gemelas. Desde la de poniente se tiene una buena panorámica de la ciudad.
Callejeamos a partír de la calle Compañía por plazas y casas hasta la Plaza de las Flores y el Mercado Central .
Muy cerca hacia el norte se encuentra el Yacimiento Arqueológico Gadir y la Torre de la Bella escondida, para continuar hacia la Plaza de España, donde nos espera el monumento a a la Constitución española de 1812, la “Pepa”, la Casa de las Cuatro Torres y el edificio del Palacio de Diputación .
Bordeamos el Cádiz antiguo con la mar a la derecha. Alameda Apodaca. Al inicio de este parque nos desviamos a la izquierda para ir a una de las plazas más bonitas y populares de la ciudad: la Plaza Mina, parada obligatoria por donde pasa la vida gaditana y el Museo de Cádiz. Volvemos en dirección a la bahía al Parque Genovés y el Baluarte de la Candelaria y Playa de la Caleta.
A dos pasos nos espera también la vecina Plaza de San Antonio, de la que se destaca la iglesia de estilo barroco y neoclásico.
De San Antonio iremos a la Torre Tavira, en la calle Marqués del Real Tesoro, única torre mirador abierta al público. Interesante visita, en grupos de 18 personas y con tiempo limitado. Entre sus atractivos una cámara oscura que proyecta una imagen viva y en movimiento de lo que ocurre en el exterior, además de dos salas de exposiciones.
Y siguiendo por calle Sacramento vamos a parar al mismísimo Gran Teatro Falla, donde cada febrero desde tiempos inmemorables, chirigotas, comparsas y cuartetos estrenan para Carnavales sus esperadas coplillas de agudas letras que repasan lo acontecido en el año al estilo más gadita .
Castillo de San Sebastián, aal que se llega por un camino de piedra ( no es visitable),
Playa de la Caleta, en la misma arena, se eleva el antiguo Balneario del Carmen.
Campo del Sur que rodea el casco antiguo por el sur, desde el Baluarte de los Mártires hacia a la Catedral. Donde cámara en ristre, sin duda no pararemos de disparar. En esta zona no hay playa, sólo grandes bloques de piedra que hacen de barrera natural con el mar.
Si aún queda tiempo, otra opción es dirigirnos a la parte nueva las playas que tiene Cádiz ciudad, repartidos entre la playa de Santa María del Mar, la Victoria o Cortadura.
Entre los numerosos espectáculos que acoge a lo largo del año, cabe destacar el Concurso oficial de agrupaciones del carnaval de Cádiz, que se convierte uno de los mayores atractivos del carnaval de la ciudad. Durante el Carnaval las distintas agrupaciones carnavalescas muestran todo su arte y genialidad en diversas modalidades en el Gran Teatro Falla.