Tripulaciones de Galicia y Portugal se batirán en aguas atlánticas para tratar de conseguir el record del Carrumeiro
· Las casi 100 millas de la subida al Carrumeiro Chico desde Baiona se disputarán en el marco del 45º Conde de Gondomar – Trofeo Banco Sabadell
· El paso de los veleros se podrá divisar desde numerosos arenales de las Rías Baixas en una jornada de mucho sol y calor pero con buen viento para navegar
· La previsión es que los primeros veleros en cruzar la línea de llegada lo hagan bien entrada la noche tras más de 12 horas de navegación ininterrumpida
· La regata se podrá seguir en directo a través de la web del Monte Real Club de Yates que trasmitirá la posición de los veleros durante todo el recorrido
Baiona, 23 de julio de 2020 .- Tripulaciones de Galicia y Portugal se batirán mañana viernes en aguas del Atlántico para tratar de vencer en la regata más emocionante y complicada de la vela gallega, la subida al Carrumeiro Chico, un recorrido de casi 100 millas de distancia enmarcado en el 45º Conde de Gondomar – Trofeo Banco Sabadell, que organiza un año más el Monte Real Club de Yates.
Pocos bajos hay en Galicia tan conocidos como el del Carrumeiro, una piedra considerada durante muchos años uno de los mayores peligros para la navegación por las rías gallegas. Justo en el centro del canal de entrada a la ría de Corcubión, y sin balizar hasta 1863, esta roca, que apenas sobresale sobre la superficie, protagonizó numerosos naufragios a lo largo de la historia.
Con el objetivo de intentar evitarlos se colocó sobre ella primero una boya de campana, posteriormente un trípode metálico de 5 metros y después una boya cónica, pero los temporales fueron barriendo estos sistemas uno a uno, hasta que en 1917 se construyó sobre la roca una torre maciza de hormigón de 10 metros de altura que se mantiene intacta desde entonces.
Son esos bajos y esa torre la que deberán virar los aventureros regatistas que este año se han inscrito para tratar de completar el reto del Carrumeiro Chico, una regata complicada no solo por la distancia, próxima a las 100 millas, sino porque implica navegar entre bajos rocos durante muchas horas y tanto en horario de día como de noche.
Entre las ocho tripulaciones que participarán en la prueba se encuentra la que lidera armador y patrón portugués Rui Ramada, que lleva participando en la competición desde 1988 con diferentes equipos y a bordo de hasta 5 barcos diferentes.
En la última edición del Conde de Gondomar, con el Yess Too (un Swan 45), fueron los ganadores, imponiéndose también en la subida del Carrumeiro, que vencieron tanto en tiempo real como en compensado. Salieron a las 11 de la mañana de Baiona con toda la flota, viraron el faro de la ría Corcubión al filo de las 7 de la tarde y alcanzaron la llegada a las 4 y media de la madrugada. Emplearon 17 horas y 36 minutos en completar las 95,43 millas de recorrido.
Los de Rui Ramada lograron la victoria en la gran prueba del Conde de Gondomar pero se quedaron a más de 5 horas de superar el récord del Carrumeiro Chico, que ostenta desde el 2011 el Cenor & De Dietrich (un Farr 50) que, con Martín Bermúdez de la Puente al frente, logró completar la regata en 11 horas 56 minutos y 57 segundos.
Otro de los barcos que navegarán hasta el Carrumeiro será el Aceites Abril de los hermanos Luis y Jorge Pérez Canal, con Pablo Iglesias de táctico. Los ourensanos, luciendo grímpola del Real Club Náutico de Vigo, tratarán de lograr su quinta victoria en el Conde de Gondomar.
El náutico vigués es el que más representación tendrá en la prueba de larga distancia, ya que además del Aceites Abril también competirán el Pairo 8 de José Luis Freire, patroneado por Luis Bugallo; y el Magical de Julio Rodríguez, con Gonzalo Araujo encargado de la parte táctica.
Por el Monte Real Club de Yates, además del Yess Too, también aspira a la victoria el Marías, liderado por otro portugués, Manuel María Cunha.
El Real Club Náutico de Portosín estará representado por el Arroutado, de José Manuel Pérez, al que acompañará Javier de la Gándara. El regatista vigués, después de años compitiendo en el Conde de Gondomar a bordo del J80 Okofen, vuelve a la navegación de larga distancia con los sonenses.
El Bon III, del Náutico de Punta Lagoa, otro de los habituales en la subida al Carrumeiro Chico, estará liderado por Victor Carrión y llevará a bordo a Ana Sardiña, una de las pocas mujeres inscritas para esta regata junto con Vanesa Martínez, del Marara IV, del Club Marítimo Rías Baixas, que patroneará una vez más Javier Montenegro.
Este año, tras salir de Baiona a las 11 de la mañana, la previsión es que los veleros empiecen a cruzar la línea de llegada bien entrada la noche, tras más de 12 horas de navegación ininterrumpida. Su recorrido se podrá divisar desde numerosos arenales de las Rías Baixas y también seguir en directo a través de la web del Monte Real Club de Yates, que trasmitirá la posición de las embarcaciones durante todo el recorrido. Será una jornada de regata típicamente estival, con sol y calor, pero también con buen viento para navegar.