Santander. Tras más de dos horas y media de reptar sobre el agua, se suspendió la tirada del Crucero
Para la jornada del sábado, la clase crucero se las prometía felices, pues con una modificación del programa de regatas para esta jornada, se había indicado que la regata se celebraría en el Abra del Sardinero, para lo que también se había modificado la hora de salida, retrasándola hasta la 1530.
Desafortunadamente, uno de los miembros del comité se puso malo durante la mañana, teniendo que ser trasladado a urgencias, con lo que toda la programación de la jornada de regatas se trastocó aunque afortunadamente lo del miembro de Comité solo quedó en susto.
Para la tirada se mantuvo la hora de salida, pero la competición se realizó desde el Club, sobre un recorrido fijo, en el que había que tomar una baliza fondeada al norte de la Isla de Santa Marina, dejándola por babor, para desde ella navegar a otra baliza fondeada al 080º de la primera y a unas 0.8 de milla de distancia, que también había que dejar por babor.
Una vez tomada esta había que navegar en demanda de la nº 1 para dejarla por estribor y desde ella navegar en demanda de la línea de entrada que se encontraba en el Club.
A pesar de la tarde soleada que marcaba la jornada, tan solo 4 tripulaciones se acercaron a tomar parte en la competición, de ellas tan solo dos pertenecientes al Club, lo que demuestra la grave crisis por la que sigue pasando el Crucero del Club.
La salida se dio en popa, con lo que inmediatamente los escasos participantes largaron sus Spys y Genaquers.
Cuando llevaban navegando unos 500 metros el viento roló a la izquierda más de 60º comenzando a encalmarse, afortunadamente la marea era vaciante y ayudaba a salir de la bahía. Poco a poco el escasísimo viento que quedaba, que era más bien un leve soplido, fue rolando a la izquierda más de 120º, no sobrepasando su intensidad de 1 o 2 nudos, con lo que con la ola que había en el abra se hacía complicadísimo el poder gobernar las embarcaciones por falta de velocidad en las misma.
En estas condiciones la llegada a la primera baliza llevó más de hora y media, siendo un suplicio el navegar en demanda de la segunda, que supero las dos horas y media de esfuerzo y frustración a las escasas tripulaciones que tomaron parte en la jornada.
Después de haberla tomado, con gran dificultad, y ante la falta de viento que imposibilitaba el remontar la marea vaciante, y por ello la entrada en la bahía, el comité suspendió la prueba.
La jornada de hoy, de haberse celebrado en el Abra del Sardinero, no se hubiese dado la salida por falta de condiciones para ello, con lo que los participantes no hubiesen tenido que soportar más de dos horas y media de concentración y estrés para intentar hacer navegara a sus embarcaciones, y sin embargo dando la salida desde el Club, la prueba se celebra a pesar de las condiciones que reinen en el momento de dar la, siendo imprescindible el suspenderla cuando las condiciones sean como las que han tenido que soportar los cruceros en las dos últimas jornadas, lo que patentiza la imperiosa necesidad de modificar los recorridos para esta clase, para no tener que soportar navegaciones de más de tres horas, y una lucha sin cuartel con la marea a la hora de salir o entrar de la bahía los barcos de menor eslora.
J.F.M.J.O.