Remontada espectacular del ‘Bizkaia Maitena’ en la Regata a la Inversa-BBVA más emocionante
Salió el último, pero llegó el primero en el final de regata más emocionante posible.
El ‘Bizkaia Maitena’ de Mikel Emaldi, al superar en los últimos metros al ‘Citius’, se adjudicó la XXVI edición de la Regata a la Inversa-BBVA, prueba organizada por el Real Club Marítimo del Abra-Real Sporting Club y que contó con la participación de 60 embarcaciones en las aguas del Abra. El Corel 45, el mejor en esta regata siempre tan esperada cada primero de mayo por las tripulaciones, venció in extremis tras emplear casi dos horas en las 8´5 millas de recorrido. El ‘Bizkaia Maitena’, el barco más grande de la flota vasca, decidió en el Abra interior a poco de la meta tras maniobrar mejor y recuperar metro a metro la ventaja del ‘Citius’, que ya se veía ganador. “Les hemos pasado en la línea de llegada” manifestó Mikel Emaldi, patrón de la embarcación vencedora.
El ‘Bizkaia Maitena’ remontó y acabó por delante del ‘Citius’ de Javier Regueiro, segundo a 14 segundos, y del ‘Gaitero’ de Juan Valdivia, a 1 minuto y tres segundos. La cuarta plaza fue para el ‘Go Blue’ de Ángel Herrerías, quinto el ‘Zur’ de Antonio Jobbe-Duval, sexto el ‘Fingolfin’ de Gonzalo Chávarri, séptimo el ‘Garabato’ de Javier Chávarri, octavo el ‘Tamoa’ de Alfonso de Senillosa, noveno el ‘Symphony’ de Javier Onaindia y décimo el ‘Zazpiki Lovely Rita’ de Juan Ignacio Gomeza.
La Regata a la Inversa-BBVA es una de las más peculiares del calendario al no existir los tiempos compensados. Esta prueba se convirtió así en una emocionante persecución de los barcos con más prestaciones a las embarcaciones más pequeñas. En las últimas ediciones, la Regata a la Inversa-BBVA fue disputada con mucho viento y ganada por los barcos que salen en primer lugar. Esta vez, en la XXVI edición, fue lo contrario con vientos fuerza 2 variable, y el ‘Bizkaia Maitena’ fue pasando uno a uno a todos los participantes hasta hacerse con la victoria en un final de suspense.
El primero de mayo es el día de esta singular prueba de vela en la que cerca de 500 tripulantes, repartidos en decenas de cruceros y barcos J 80, persiguen una victoria siempre abierta, tal y como se demostró en el Abra.