Nuevo desfile de cruceros en Santander, en que una vez más ha sido imposible regatear.

La tarde pronosticaba una buena jornada para la práctica de la vela, pero, una vez más se malogro con la designación de un recorrido fijo del programa de regatas, el que como ocurre con estos, protagonizo un desfile de barcos, en el que no cabía ningún tipo de competición, además, por si esto fuese poco, para nada se tiene cuenta a la marea a la hora de encarar la entrada a la bahía, que cuanto toca vaciante, como ha ocurrido hoy, el poder remontarla a la caída del viento es una operación casi imposible. Hoy, además la entrada a la bahía ha coincidido con la del ferry, que hizo su entrada entre boyas cuando los barcos más pequeños, y casi sin viento, se encontraban en la enfilación y las boyas del inicio de la canal.

Cuando faltaban segundos para la salida, el viento roló del SSO al NW, lo que en este tipo de desfiles, no afectan para nada, pues la salida se daba en popa.

La navegación hasta la bocana del puesto fue de popa cerrada con la marea subiendo, lo que dificultaba la navegación; a partir del faro de la Cerda, los spys no entraban, navegando hasta la baliza nº 1 a un desacuartelar, navegación en la que se imponían las polares de los barcos,

Desde la baliza 1 a las 2 se navegó de ceñida, con una bordada larguísima hasta el ley line, que quedaba cerca de la baliza nº 2, que por cierto no estaba fondeada donde marca el recorrido. El siguiente tramo fue de popa. Debido a la mar de fondo, que alcanzaba los 2 metros, la baliza no se veía, con lo que varias tripulaciones se pasaron de la misma.

La navegación en demanda de la entrada fue a un desacuartelar hasta la boya nº 2 de la canal, momento el que el viento, como sucede siempre en Santander, comenzó a amainar, llegando a desaparecer, por lo que la remontada de la fuerte correntada, esta vez en contra para los barcos pequeños, por lo que supuso un drama para los de menor eslora pero no para los grandes, que entraron con marea a favor. Está claro que a pesar de que los barcos de pequeña eslora, que son los más numerosos, para nada se tiene en cuenta a la hora de establecer los recorridos, sufriendo lo que no está escrito para en estas condiciones poder terminar las pruebas, siendo completamente injusto el evento, ya que los barcos de mayor eslora entran en la bahía con viento, mientras que los pequeños, se quedan encalmados, terminado como algunos han hecho hoy, después de la puesta del sol.

La flota aprobó el año pasado, y no se ha modificado después, que los barcos de menor eslora harían un recorrido más corto que los barcos de mayor eslora, lo que en el día de hoy, y en la tirada de hace dos semanas ha sido un falacia, También se acordó por la flota que se estableciesen clasificación diferentes para los participantes, lo que últimamente no sucede, metiendo a todos en el mismo saco.

Nadie se quiere enterar de lo que suceder en el crucero santanderino, en donde cada vez es más escaso el nivel sobre todo en los barcos pequeños, que son los que más abundan en los pantalanes, pero que nadie les motiva para que tomen parte en la regatas, y a los que si lo hacen, paran nadas eles tiene en cuenta, siendo incomprensible, que con estos recorrido el Yamamay siga manteniendo su nivel.

La clasificación ha sido

Clase Club. 1º Soledad, 2º Mushungu, 3º Gabriel Onofre, 4º Karen V, 5º Brio. Se retiró el Puntarras

Clase IRC II Y III

1º Yamamay, 2º Marieta, 3º Airam V, 4º Vincitur, 5º Izaro segundo, 6º Kirios I

J.F.M.J.O.