Nuevo desfile, esta vez con 24 nudos de viento en la tirada final del trofeo Presidente de Cantabria para la clase crucero.

Mientras que los crucero realizaba nuevamente el recorrido nº 9.1 del programa de regatas del Club, en el que una vez más, los participantes tuvieron que navegar a rumbo directo de baliza a baliza, los j80, que solo contaban con 5 tripulaciones en el agua, realizaban la competición en el abra del Sardinero sobre un recorrido barlovento sotavento; saltándose la organización a la torera el acuerdo de clase crucero, que año tras años pide que siempre que salga el J80 al Sardinero para regatear, el crucero navegue con ellos con salida desde la motora. Lo que incompresiblemente, una vez más, la organización no ha tenido en cuenta., por lo que habrá que preguntarse el porqué de estas diferenciase.

En cuanto a la determinación de las clases, se sigue sin tener en cuenta los acuerdos de flota, dándose la coexistencia que una de la embarcaciones de la clase II en la tirada de hoy ha ganado en tiempo compensado a todas las de las clase I excepto al Yamamay.

Está claro que los recorridos y la disminución del número de pruebas que se ha fijado en esta edición tras la modificación del anuncio de regatas del Trofeo Presidente de Cantabria no es la manera de promocionar la clase crucero en el Club, sino todo lo contrario. Una cosa es el regatear y otra es querer llamar regata a una navegación como la de ayer y la de hoy, en las que se ha navegado en un recorrido que supone un desfile, en que no hay que hacer más maniobras que la de la toma de la baliza, y en el que la salida, suele ser con vientos portantes, como hoy, que esta maniobra se ha hecho navegando de aleta.

Es imposible establecer un recorrido que se aprecie sin tener en cuenta a los participante; del que se enteran poco antes de largar la señal de atención; ayer se dio la salida sin viento y hoy con más de 24 nudos, eso después de estar esperando que la canal de navegación quedase despejada del trafico comercial, lo que obligó a retrasar la salida, aunque este aplazamiento no fue suficiente, ya que parte de la flota se vio comprometida con la entrada del ferry que cada domingo entra en Santander, al que unas tripulaciones cortaron la proa, mientras que otras tuvieron que pararse para pasarle por la popa.

Para la tirada de hoy se obligó a las tripulaciones a navegar con el chaleco salvavidas puesto, sin embargo ninguna embarcación de seguridad acompañó a los participantes en esas duras condiciones de viento que superaba los 25 nudos en las rachas, dejándoles completamente desatendidos a su suerte.

En esta ocasión, sin venir a cuento, el comité determinó que la clase III realizase un apaño al recorrido, lo que no sucedió en la tirada de ayer.

Mientras las clases I y II navegaron el recorrido completo, en el que la salida fue para el Gabriela Onofre, que rápidamente fue superado por los barcos de más eslora; la maniobra de la toma de la primera baliza, donde los participantes fueron llegando según sus polares, fue de trabuchada con 23 nudos. El siguiente tramo fue a un desacuartelar, en el que el socaire del palacio de la Magdalena, que afectaba de forma brutal al recorrido (otro de los grandes inconvenientes del obsoleto recorrido nº 9 con viento sur), dejó a los participantes sin viento, dando lugar a varios cambios en la clasificación, para lo que no había posibilidad alguna de evitarlo, que desde ese momento determinaron sin más la misma.

El tercero tramo se navegó de aleta, siendo tan solo tan solo tres tripulaciones las que largaron sus spys.

En el cuarto tramo la navegación fue de ceñida, con el bordo de estribor hasta casi la baliza, siendo la navegación del último tramo del desfile en demanda de la línea de entrada a un descuartelar hasta la misma entrada, momento en que el viento roló al norte y luego al noroeste. Total otra jornada de crucero desperdiciada cuando se podía haber navegado en el Sardinero con los J80, sino dos prueba, una al menos bajo un barlovento sotavento, en la que habría que haber tenido que aplicar a la navegación táctica y varias maniobras; recorrido en el que la salida habría que haberla hecha de ceñida, con lo que ello conlleva de control de la embarcación por parte de las tripulaciones para hacerla como corresponde, pero padece ser que a alguien no le interesa que esto ocurra en la clase crucero, en la que casi todas las semanas se vienen realizando desfiles de un solo bordo entre baliza y baliza.

La tripulación que ayer se saltó el reglamento colisionado en un babor estribor, hoy ha navegado en el desfile como si nada hubiese ocurrido en la jornada que dio comienzo al trofeo

En el trofeo del año pasado la organización no recibió el trofeo del Presidente de Cantabria para la clase Club, quedando este sin ser adjudicado a la tripulación que le ganó en aquella edición,

La clasificación de la edición 2019 del trofeo Presiente del Cantabria para la clase Crucero ha sido:

Clase III: 1º Stardut, 2º Galua

Clase II: 1º Izaro II, 2º Kirios I, 3º Gabriela Onofre

Clase I: 1º Yamamay, 2º Mi Gabriela, 3º Marieta

J.F.M.J.O.