En la tirada del crucero santanderino el pez grande se come al chico
La jornada incomprensiblemente se dio con vientos variables que soplaba con intensidades de entre 2 y 3,5 nudos, intensidad que con la que no tiene sentido dar una regata de vela, y mucho menos con un recorrido fijo en donde la corriente tiene mas intesidad que llega a los 4 nudos. La regata de los J80 que se daba al mismo tiempo desde la motora, se retraso más de media hora a la espera de que el viento soplase por encima de los 5 nudos, realizando la tirada fuera de la bahía donde el viento apenas soplaba.
Está visto que a los cruceros, sople lo que sople se las da la salida y que sea el tiempo limite el que decida si se termino o no la prueba. Con esa filosofía difícil será que la aguda crisis que afecta a la vela pesada sea superada.En la tirada del sábado tomaron parte 13 tripulaciones, de las que acabaron 12. Los participantes de la clase Crucero a los que se les dio la salida desde el Club, vieron con estupefacción que a los J80, como en el interior de la bahía no había condiciones para dar las pruebas, se les sacaba al abra, mientras que al crucero se le daba la prueba sin condiciones, perdiendo la oportunidad de tener la salida y la regata en unas mejores condiciones deportivas.La verdad es que el conseguir, como en la jornada de ayer que toda la navegación se hiciese sin una viradas (solo las de montar las balizas del recorrió), navegando todos los tramos de la regata de un solo bordo es muy difícil, sin embargo el crucero santanderino lleva tiempo haciendo las regatas desde el Club en estas condiciones. Parecía que tras el recorrido que se instalo el sábado pasado, las regatas sobre recorridos fijos se iba a terminar, pero la cruda realidad es que se sigue igualLa salida en esas condiciones de viento estuvo complicada, pues al no haber posibilidad de maniobra en la línea, se monto un “follón” en la salida en donde los barcos más grande no respondieron a la orzada de los más pequeños, con lo que se formó una mele, en la que el barco con derecho a paso fue el más perjudicado. Pero no solo eso sucedió en la tirada, sino que tras la salida y a pocos metros de la misma, uno de los barcos grandes, que alcanzó a uno pequeño por barlovento, cuando el pequeño que iba algo mas orzado le exige rumbo debido (parecer ser que ha habido un cursillo de reglamento en la FCV, donde el patrón del grande ha sido un alumno aventajado). Con lo que si el barco pequeño no se aparta se lo come el grande-La salida hasta la bocana se pudo realizar gracias al la vaciante, a la altura de lla Horadada, los participantes arriaron sus SPYS y navegaron en un descuartelar hasta la baliza nº 1 que estaba en el horizonte, desde allí lo hicieron en otro descuartelar hasta la 2 baliza del recorrido fondeada en la ensenada de los Molinucos, donde el viento suele ser escaso y rolon, para desde allí la clase II navegar hasta la baliza 1 y la clase III y club hacerlo hasta la entrada.La navegación en la bahía fue un caos como consecuencia de los pozos y de las roladas que se producían en si interior, dándose la paradoja de que los barcos pequeño, con un recorrido acortado terminaron más tarde que los barcos grandes, lo que demuestra que algo no funciona, y que por tanto hay que cambiarLa clasificación de la tirada, que no aportó nada al competición fue:Clase Club: 1º Mushungu, 2º Gabriela Onofre, 3º Soledad, se retiro el PuntarrasClase III: 1º Airam V, 2º Izaro II, 3º Kirios IClase II: 1º Yamamay, 2º Mi Gabriela, 3º Gorilon, 4º Murphy, 5º Alalunga, 6º Salen J.F.M.J.O.