Route du Rhum: El romanticismo de Loïck Peyron y su trimarán “Happy”

Más que percebes, desde un Mini Transat hasta un maxi trimarán. La aureola de Loïck Peyron, su resplandor sobre los océanos es abrumadora desde sus 18 años de edad. Lo ha navegado todo, en 1979 su primera participación en la Mini Transat 650, sobre multicascos intratable en la época de los años ochenta, ha sido “figarista”; en 1990 logra el segundo puesto en la Vendée Globe; en los noventa fue imparable con la saga de trimaranes “Fujicolor” y “Fujifilm”; ha ganado la Barcelona World Race en 2011 junto a Jean Pierre Dick; y lo más, de lo mas, batir el récord Jules Verne en 2012 con el maxi trimarán “Banque Populaire”, invirtiendo 45 días, 15 horas, 42 minutos y 53 segundos en dar la vuelta al mundo a vela sin escalas.

Tan codiciado es el conocimiento de Loïck Peyron, que es pieza clave en el equipo de Copa América “Artemis”.

Una Route du Rhum con otra velocidad. La tenacidad de Peyron es muy fuerte, desde navegar a bordo del catamarán “Lada Poch” durmiendo con su brazo pegado al “stopper” (mordaza) del carro de la vela mayor, para poder lárgalo al mínimo contratiempo y evitar volcar; a plantearse ahora el romanticismo de participar en la Route du Rhum en solitario con un velero de 35 años, que él le llama “Happy”.

Si tu velero se llama “Happy”, tiene más de treinta años, está construido en madera, con velas de dacrón y pretendes participar en la decima edición de la “Rout du Rhum” está claro que vas a practicar “slow sailing”. Una navegación tranquila frente a los mejores y más rápidos veleros de regatas transoceánicas.

Una navegación mágica como el espíritu que siempre ha pretendido transmitir la “Route du Rhum” desde sus orígenes, una regata abierta a todos los navegantes solitarios a bordo de monocascos o multicascos, y para todas las esloras.

Peyron no llevará mucha electrónica para la ayuda a la navegación, tan solo el radar que aparece sobre el mástil y algún artilugio más, como mucho una calculadora para las retas de altura; pero nada de programa informático de navegación a bordo, que le integre la polar del trimarán con le información meteorológica.

Cada día, si lo considera necesario, tomará una reta de altura y hará el cálculo correspondiente, lo que le llevara un par de horas, y después posicionarse en la carta náutica de papel. Una tarea que espera realizar durante los casi 25 días de navegación transoceánica desde Saint Malo hasta isla Guadalupe.

Rememorando la victoria de Mike Birch hace 36 años. El trimarán “Happy” es gemelo del que gano la primera edición de la “Route du Rhum” en 1978. En ese año el navegante canadiense Mikel Birch gano por 98 segundos la primera edición del Rhum con el “Olympus”, un velero de 39 pies de eslora, sobre el “Kriter V” (monocasco de 21 metros de eslora) de Michel Malinovsky, cuando lo rebaso a escasos metros de la llegada en Pointe-à-Prite.

El “Happy”, de unos 12 metros de eslora, es un diseño del arquitecto naval estadounidense Walter Greene, construido en madera de contrachapado marino. Un velero que Peyron localizo en el sur de Inglaterra y que lo ha revivido en los astilleros franceses de Multiplast en Vannes.

Prácticamente nada ha cambiado sobre el diseño original, tan solo ha mejorado la maniobra instalando nuevos winches Pontos de cuatro velocidades. También hay nuevos herrajes y escoteros actuales. Así como cabullería de la mejor calidad, las fotografías la delatan. Cuatro meses de intenso trabajo, desmontando todo, lijando, reparando y vuelta a montar; para ponerlo en el agua el pasado mes de junio.

Veremos lo que contará Peyron de su próxima travesía de 3.562 millas a bordo del “Happy”; de entrada le ha puesto el mismo número 39 de vela que utilizó el “Olympus” de Mike Birch.

c) Dury Alonso