36 días de regata y apenas 800 millas para llegar a Rio de Janeiro

Agónico. El líder Ericsson 3 tan sólo ha conseguido recorrer 136 millas en 24 horas y el Ericsson 4 al acecho de sus compañeros de equipo, 156. La mejor nota de las pasadas 24 horas se las lleva el Telefónica Azul que, navegando a 600 millas de los líderes, ha anotado en su corredera la máxima del día: 304 millas en 24 horas.

El doloroso y lento acercamiento de la flota a Rio está aunando todos los ingredientes para que las tripulaciones rompan sus mermados nervios.

Los tres primeros clasificados se encuentran inmersos en el centro de una alta presión que a duras penas les deja navegar. Lejos de encontrar condiciones óptimas, los dos Ericsson y el Puma pelean por salir de un agujero de viento totalmente inestable, en cuanto a intensidad y dirección.

Por su parte, el irlandés Green Dragon continúa con su opción de bordear la alta presión, acercándose a la costa argentina e intentar gastar su último cartucho en el ataque al americano Puma.

Las condiciones tan inestables propician situaciones explosivas, con grandes ganancias y penosas perdidas.

Todos han ganado millas respecto al líder de la etapa Ericsson 3, aunque unos con mayores beneficios que otros. Este es el caso del Telefónica Azul que, navegando con más de 10 nudos que sus competidores y, aun sin estar bajo la influencia del anticiclón, ha recortado casi 140 millas en las ultimas 24 horas.

El canario David Vera comentaba esta misma mañana desde el Telefónica Azul: “Hoy ha sido un día muy, muy tranquilo, de ceñida rapidita, con sol y nada más que hacer que llevar el barco lo mas rápido posible rumbo a Rio. En este sentido ha sido un día muy bueno para nosotros, hemos

recortado casi 200millas al Green Dragon. Esto no va a cambiar absolutamente nada para el resultado final, pero por lo menos no estamos tan atrás como ayer, y esto nos hace mas contentos.

De todas maneras -y en esta situación de presión mental que sufre sobre todo el líder Ericsson 3- los suecos que comanda Magnus Olsson han defendido mejor de lo esperado su posición y mantienen aun una ventaja de 61 millas con el Ericsson 4 del local brasileño Grael, 125 millas con el Puma de Read, 334 con el irlandés Green Dragon del Walker y 601 con los españoles del Telefónica Azul de Bekking y Martínez.

UN PROBLEMA IMPORTANTE A SUMAR: LA COMIDA

El lento progreso de la flota está haciendo mella en las provisiones de comida de a bordo en cada uno de los Volvo Open 70. La mayor parte de los equipos había calculado comida para cerca de 36-40 días de etapa.

Las previsiones en este momento no son muy positivas antes la llegada de la flota de la Volvo Ocean Race. A día de hoy se calcula que tanto el primer como segundo clasificado lleguen a Rio de Janeiro el día 25 de marzo, lo que añade 3 días más a las 36 jornadas ya navegadas, como mínimo.

Rick Deppe daba cuenta de este hecho la pasada noche. “Poco a poco ya estamos comenzando a racionar la comida. Habíamos previsto comida para una etapa de 36 días. Si a esto le añadimos que hemos encontrado una de las bolsas de comida diaria en mal estado, al principio de la etapa, os podréis imaginar que hoy es nuestro último día de ritmo de comida “normal”. Tenemos bolsas de comida para emergencia, que contienen barritas de proteínas y cereales...”

La situación es parecida a bordo del Ericsson 4, como se lamentaba el brasileño Joca Signorini en una comunicación con el Cuartel General de la Volvo Ocean Race, en el Reino Unido: “Preparamos bolsas de comida para 38 días y ya hemos dado cuenta de 3 extras más, así que creo que llegaremos a Rio realmente hambrientos. No puedo con las ganas de una barbacoa brasileña de verdad y sólo espero que nuestros amigos se hayan hecho cargo de ello”.

Con el ambiente alterado ya por la falta de comida, las mínimas situaciones se convierten en una situación necesaria de hablar. “Jono ha estado a punto de volverse loco esta tarde, cuando se dio cuenta de que alguien se había comido su barrita de chocolate. Ha estado hablando de ello durante toda su guardia nocturna”, reportaba Bouwe Bekking desde el Telefónica Azul durante la madrugada.

Y es que las cosas no están como para que se te “descuide” la barrita de chocolate que endulzan las guardias.

TELEFONICA NEGRO EN BOXES

Mientras que la flota continúa su andadura hacia la línea de llegada en Rio de Janeiro, el Telefónica Negro de Fernando Echávarri continúa su guerra contra reloj en la Marina Da Gloria.

El barco ha llegado a Río el pasado 5 de marzo casi seis semanas después de que tuviera que retirarse de la etapa, cuando se encontraron grietas en el casco. Inicialmente el barco volvió a Singapur a vela, para de allí ser embarcado en un mercante rumbo a Rio y donde sería reparado tras un fallo de compresión en la banda de babor, que provocó la aparición de grietas. Los trabajos van a buen ritmo y se espera que el barco vuelva al agua el próximo jueves.

"Aun nos quedan cosas por hacer”, comenta Campbell Field, Jefe del Equipo de Tierra de los Telefónica. “Nuestro objetivo es estar en el agua y navegando antes de que el Telefónica Azul llegue a tierra –que imaginamos será a finales de la semana que viene-. Obviamente tenemos que enganchar la quilla, pinchar el palo y pesar el barco de nuevo, pero creo que será el jueves a primera hora cuando nos vayamos al agua”.

Por otra parte, Campbell confirma que se ha tenido que quitar una “significativa” cantidad de kilos de la quilla para compensar el área reparada, aunque también confirma que no será “dramático”. Su mayor preocupación ahora es la unidad Azul.“El planing que tenemos tan sólo nos deja un corto espacio de tiempo entre la llegada del barco y la regata costera. Vamos a tener que trabajar muy duro si queremos tenerlo todo a tiempo”.

Parte de posiciones 13:00 horas (hora española)

1- Ericsson 3, a 791 millas de Rio de Janeiro
2- Ericsson 4, a 61 millas del líder
3- Puma, a 125 millas del líder
4- Green Dragon, a 334 millas del líder
5- Telefónica Azul, a 601 millas del líder