Volvo Ocean Race: El dia despues
Primer día del “MAPFRE” en tierras chinas. Día de reuniones, de repaso, de sacar el barco del agua, de revisiones médicas y primeras novedades de cara a la cuarta etapa
Hoy ha comenzado para el “MAPFRE” la cuenta atrás para la cuarta etapa. En el primer día del equipo al completo en Sanya (China), el equipo de tierra se ha centrado en sacar el palo y el barco del agua para empezar con la lista de trabajos tras más de 5.000 millas de navegación. La tripulación hoy no ha tenido cita con el gimnasio pero sí ha estado reunida para hacer una revisión profunda de la etapa y ha pasado los controles médicos que realizan con el doctor Pablo Díaz-Munío y el responsable de salud del equipo Iñigo Losada cada vez que llegan a tierra. Ahora, tendrán cuatro días de descanso, que la mayoría pasarán en Sanya.
Respetando el orden de llegada a China de cada equipo, el “MAPFRE” ha sido el cuarto en salir del agua a primera hora de la mañana. No se ha detectado nada fuera de lo normal, aparte de restos de algas especialmente en los timones y aceite por todo el casco.
“Ha sido una etapa tan lenta, que al estar parados mucho tiempo y con el agua tan caliente, como estos barcos no tienen patente cogen muchas algas”, ha explicado el proa Ñeti Cuervas-Mons. “En esta etapa nos hemos dado cuenta que, al ser los barcos tan iguales, cualquier trocito de plástico o alga, por muy pequeña que sea, te frena. De hecho, en toda la vuelta anterior me tiré al agua una vez y en sólo tres etapas de ésta, ya me he tirado al agua tres veces”, añadía el cántabro.
Anthony Marchand no estará en la próxima etapa para poder someterse a una cirugía dental
La cuarta etapa de la Volvo Ocean Race, que discurrirá entre China y Nueva Zelanda, verá cambios en la tripulación del “MAPFRE”. Uno de los tripulantes menores de 30 años, Anthony Marchand, será baja debido a un problema dental que durante la mitad de la pasada etapa, cuando navegaban por el sur de la India, lo tuvo tirado en su litera durante varios días: “Estuve enfermo como una semana, con mucha fiebre. Por suerte, Xabi cubrió mis guardias durante cinco días para suplir la falta de un tripulante en cubierta. Yo descansé y recuperé fuerzas pudiendo terminar bien la etapa”, explicaba hoy desde China.
“Fue una etapa buena, si no fuese por eso. Todo vino provocado por un problema que había tenido antes de la salida de Abu Dabi. La típica historia de una muela que te da la lata y luego siempre vuelve”, añadía.
Un problema de salud que es necesario solucionar cuanto antes para volver a estar a disposición del equipo, de ahí que tras asistir a las reuniones de tripulación y estar con el doctor, Marchand haya cogido un avión rumbo a Francia: “Esta noche vuelo a casa para someterme a una cirugía dental y recuperarme. Estoy deseando volver más fuerte y con confianza”, señalaba.
En los próximos días el equipo confirmará quién sustituirá al francés a bordo en la próxima etapa.