Todos se acercan al Groupama tras sufrir ayer una soberana paliza por la tormenta tropical ‘Alberto’
El grupo perseguidor comienza a ganar terreno al Groupama, que acertó en el momento de trasluchar hacia Europa pero ve cómo sus cinco rivales se acercan disfrutando ahora de mejor presión. En el reporte de las 12:00h, el PUMA es segundo y se encuentra a 22,1 millas del líder, seguido 4,2 millas más atrás por el Telefónica. El CAMPER es quinto. Todos cruzarán hoy la barrera de las 3.000 millas a destino.
La tormenta tropical ‘Alberto’ rompió los pronósticos y evolucionó ayer hacia el sureste, tragándose de un plumazo a cinco barcos de la Volvo Ocean Race 2011-12. Sólo el Groupama, que decidía trasluchar a primera hora de la tarde para empezar a ganar este, se libraba de visitar el ojo de la tormenta, donde sus rivales se encontraron con vientos de 35 nudos de proa, olas enormes y una peligrosa ración de relámpagos que les obligó a “navegar en modo supervivencia” durante varias horas, como reconocía esta mañana desde a bordo del Abu Dhabi su patrón, Ian Walker.
Franck Cammas aprovechó el desconcierto para demarrar con la proa apuntando hacia Europa, llegando a disfrutar de 47,3 millas sobre su inmediato perseguidor en el reporte de las 21:00h. En ese momento, el CAMPER ocupaba la segunda posición tras superar al PUMA y el Telefónica, pero una cruel encalmada enviaba al barco de Chris Nicholson a la quinta plaza sólo tres horas más tarde. Desde entonces, el pelotón no ha dejado de acelerar, ahora sí disfrutando del efecto turbo de navegar en la cresta de ‘Alberto’, con el que parecen haber hecho las paces. Este mediodía, la diferencia entre el líder y la cola del pelotón, ocupada por el Sanya, es de 44,5 millas.
En el reporte de las 12:00h de esta tercera jornada de competición de la Etapa 7, las velocidades se han establecido en el entorno de los 16-19 nudos, y el grupo perseguidor continúa acercándose al líder en un viento de componente sur. El PUMA conserva la segunda posición, ahora a 22,1 millas del Groupama, seguido 4,2 millas más atrás por el Telefónica, que ha decidido ganar latitud hacia la zona por la que navega el Abu Dhabi, el más rápido en las últimas tres horas. El barco de Ian Walker ha promediado 19,6 nudos, por 15,4 nudos del de Franck Cammas.
Desde a bordo del Groupama miran ya por el retrovisor conscientes de que el combustible comenzará a escasear por proa en cuanto el efecto del anticiclón sea más fuerte que el de ‘Alberto’. La palabra compresión comienza a sonar de nuevo, y eso suele beneficiar a los galgos sobre la liebre. De momento, el grupo perseguidor acumula cuatro reportes consecutivos con velocidades superiores a la del líder.
El barco de Franck Cammas está a punto de cruzar la barrera de 3.000 millas a Lisboa. Sus rivales lo harán en las próximas horas.
Parte de posiciones – Etapa 7 – Día 3 (22 de mayo, 12:00h):
1. Groupama sailing team, a 3.033,3 millas de Lisboa*
2. PUMA Ocean Racing powered by BERG, +22,1
3. Team Telefónica, +26,3
4. Abu Dhabi Ocean Racing, +33,0
5. CAMPER con Emirates Team New Zealand, +38,4
6. Team Sanya, +44,5
(* 1 Nm, milla náutica = 1,852 km)
Declaraciones desde a bordo:
Diego Fructuoso, tripulante de comunicación de Team Telefónica:
“El día de ayer no lo olvidaré con facilidad. Tengo muchos amigos que se llaman Alberto: Alberto Vadell, Alberto Cano, etc….., pero la tormenta tropical Alberto no se encuentra entre ellos. Tuvimos que hacer muchas maniobras, porque el viento rolaba una barbaridad (venía en círculos). Además, el Groupama se nos escapó un poco, justo lo que no queríamos. Ahora parece que estamos un poco más tranquilos, aunque todavía tenemos a la tormenta aquí a sota y no muy lejos. El día fue gris, con lluvia; tuvimos desde cero hasta 35 nudos de intensidad de viento y muchos cambios de velas”.
Hamish Hooper, tripulante de comunicación de CAMPER con Emirates Team New Zealand:
“Lamentablemente, acabamos siendo como un canario en una mina, cuando nos encontramos recluidos en una zona sin apenas brisa, mientras el PUMA y el Telefónica detectaban nuestra situación y lograban permanecer más altos para evitar la misma suerte. El Abu Dhabi también pudo pasarnos en lo que podríamos definir como unas horas desastrosas”.
Amory Ross, tripulante de comunicación de PUMA Ocean Racing powered by BERG:
“Llegamos a tener al CAMPER una milla por delante al este y dos millas a sotavento, al norte, pero eso fue todo lo que se pudieron acercar. Se encontraron con un viento de proa que no hizo más que empeorar, y de repente estaban navegando a 90 grados de nuestra trayectoria, en la misma amura, directos a las nubes. En el siguiente reporte estaban 22 millas por detrás. La línea que separa el beneficio de la pérdida es así de fina”.
Yann Riou, tripulante de comunicación de Groupama sailing team:
“La clave consistía en acercarse al centro de Alberto sin ser tragado por él, una forma de optimizar nuestro ángulo al viento. Y parece que hemos estado más inspirados que nuestros rivales, ya que hemos creado una buena separación gracias a nuestra temprana trasluchada. La maniobra ha tenido buenos efectos, pero su impacto será limitado. Estamos avanzando más rápidos que la tormenta tropical, por lo que nos acercamos al anticiclón, donde hay menos viento, lo que es una ventaja para el grupo perseguidor”.
Ian Walker, patrón de Abu Dhabi Ocean Racing:
“¡Menudo día! Todos salvo Groupama quedamos atrapados cuando la tormenta tropical Alberto cambió de curso y se movió hacia el sureste encima de nosotros. Mientras intentábamos aprovechar el role y la carga extra de viento al sur de esta depresión, nos encontramos con un violento cambio que nos llevó directos al ojo de la tormenta. Siguieron 12 horas caóticas cuando nos encontramos ciñendo en 35 nudos de viento. De repente, en vez de correr hacia el este por el sur de Alberto, estábamos en plena tormenta en modo supervivencia con tres rizos y foque de tiempo duro, saltando entre enormes olas, pero lo más preocupante eran los relámpagos, que caían por todas partes y parecía imposible que ninguno fuera a alcanzar nuestro palo de carbono”.
Andrés Soriano, tripulante de comunicación de Team Sanya:
“Una vez salimos de la tormenta, regresó el calor y nos encontramos en medio de un hermoso día. Navegábamos a 15 nudos y a medida que avanzaba la tarde fue subiendo la presión hasta los 22 nudos actuales”.