Si el viento no juega una mala pasada, en menos de 12 horas la flota cruzará el Meridiano 58 Este y se repartirán los primeros puntos de la etapa.
El Índico se muestra feroz. Ningún participante se ha librado de averías y daños físicos en sus tripulantes. Tras la rotura del “Puma” y en un duro mano a mano los dos barcos del Equipo Telefónica y los dos barcos del equipo Ericsson, están con una mínima diferencia de 10 millas.
En las últimas 24 horas la flota ha seguido navegando a buen ritmo, volviendo a registrar el Ericsson 4 una singladura superior al medio millar de millas, concretamente 507 navegadas en las últimas 24 horas. El tiempo duro continua, aúnque, tras los chubascos de la noche y madrugada, el viento amainó un poco durante la jornada de hoy, pasando de los 25-30 a los 20 con puntas de 24 nudos, bajando la presión esta tarde de los 20 -15 nudos.
La dirección ha rolado levemente, amaneciendo del 220-230º para quedar en el 230º-240. Las olas de entre 2 a 3 metros de altura, durante los últimos partes de posiciones, también han empujado hacia la meta volante, un una larga ruta por la “Autopista 58 E”.
"Ya llevamos cuatro días de rasca y la verdad es que se hace duro, tenemos ganas de que afloje un poco y calorcito para sacar la ropa al sol, y ponernos un poco en bañador". Así de explícito era el cántabro Javier de la Plaza desde el “Telefónica negro” en referencia a la dureza del inicio de esta segunda etapa de la Volvo Ocean Race que une los puertos de Ciudad del Cabo (Sudáfrica) y Cochin (India).
No todo el viento es igual para cada unos de los participantes. Un poco más beneficiados los que eligieron una ruta más al N. El perjudicado Puma navega a un largo con un poco más de presión, a las 17:00 su velocidad es de 19 nudos al Rv 094º. En su aleta el Telefónica Azul, 17 nudos al 090º. Por la amura de los de Bouwe Bekking, Fernando Echávarri y sus compañeros del Nrgro al 095º y 16 nudos- Bastante a su popa, Chuny y los Delta Lloyd al 091º y 18 nudos. Encabezando la flota y un poco al S de los cuatro anteriores los dos Ericcsson con rumbo E y una velocidad similar, 16 nudos y ya por el S de todos Green Dragon y Team Rusia, con un rumbo igualmente E y 16 nudos.
Las previsiones de paso en el meridano 58 Este, que traza la meta volante de esta etapa entre Ciudad del Cabo y Cochin, no son necesariamente las posiciones que indica la clasificación, que toma como punto de paso hacia la meta en Cochin un way point de ruta en dicho meridiano situado mucho más al norte de la actual latitud (38-40 grados Sur) de la flota.
Avanzando hacia el Este es la línea más corta hacia la meta volante, y como el tren de borrascas del Índico Sur ha sido constante, todavía no ven el momento de afrontar la subida hacia el Norte, donde la influencia de un fuerte anticiclón preside un gran área de aguas con poco viento.
Así las cosas, nadie ha dudado entre el dilema de una ruta directa pensando a largo plazo (la meta de etapa) y otra a corto plazo (la meta volante). Los que mejor lo tienen para sumar la mayor parte de puntos de la meta volante, son los dos barcos suecos del equipo Ericsson, que situados claramente más al Este, han podido disminuir la separación lateral Norte-Sur con el Puma, el Telefónica Azul y el Telefónica Negro: El Green Dragon persiste por el Norte y junto al Team Russia quedaban situados también más al Este que el trío sureño, por lo que el sprint final hasta la meta volante va a ser largo, intenso e incierto, y con posibles estrategias de velas diversas aprovechando las horas nocturnas. Incluso los mermados Puma y Green Dragon siguen inmersos en la pomada, mejorando sus opciones tras las averías sufridas gracias al leve pero significativo para ellos descenso del viento que recibe ahora la flota.
“Ayer, cuando empezaba a amanecer, pudimos ver por el lado de babor una luz verde, lo que significa que no podía ser otra cosa que nuestros compañeros del “Telefónica azul”. “Y allí estaban ellos”. – comentaba Mikerl Pasabant desde el Telefónica negro.
El “Telefónica negro” contraataca a la flota y entre ellos a sus compañeros de equipo “estuvimos navegando en un “match-race”, y en el próximo parte de posiciones se publicará que les hemos sacado unas 14 millas. Estamos haciéndolo bien, navegamos uno contra el otro a unas dos millas de distancia. Y se hizo de día, ellos navegaban un poco más hacia el norte que nosotros, seguramente porque navegan con otra vela diferente a la nuestra y con otra estrategia. Nuestra idea es seguir un poco más en dirección Este-Sureste, y ya veremos qué pasa cuando trasluchemos hacia el Norte.
” El navegante del barco español, el sueco Roger Nilson mostraba ya su optimismo con respecto al rendimiento del barco y la tripulación "Estamos muy contentos, acabamos de superar al “Telefónica azul” viendo su luz de posición verde, y vamos bien hacia el norte, pues conociendo nuestros handicaps, no creo que nos beneficiara una ola más grande y más viento si bajásemos más al sur"
Santi Lange describía las duras condiciones de a bordo del “Telefónica negro” "aquí estamos, el equipo trabajando de una forma impresionante, dándolo todo, y se echa mucho de menos a Cicho (descansando de su contusión en la espalda), y un trabajo increíble del 11". Mientras que su compañero Mikeel Pasabant reafirmaba que los cuatro días de viento duro y mas gruesa está empezando a pasar factura “por otra parte, toda la tripulación empieza a sentirse un pelín cansada, han sido cuatro días realmente duros en “Los 40 rugientes”, aunque todo hay que decirlo, contentos por la posición. Cada ola es genial, pero tal y como Javi Plaza dijo: “Ya va siendo hora de baños, sol y relax, ¿no?”.
Respecto a lo que apuntaba Lange de las ganas que tiene de que Cicho (Maciel Cicchinetti) se recupre lo antes posible, Pasabant adelantaba que “con suerte en un par de día tendremos a nuestro Cicho Cichetti en cubierta, trimando velas. Está ansioso por recuperarse totalmente. ¡Tenemos que atarlo para hacer que descanse!”
Su patrón, el campeón olímpico Fernando Echavarri, describía la situación de a bordo “Cuatro días y cuatro noches pegando botes por el indico sur así que de escribir poco, apenas puedo leer lo que escribo de lo que se mueve la pantalla “ Acerca de la lesión del argentino Cicho Cicchinetti, su patrón se mostraba contento con su evolución, al tiempo que describía como estaba el resto de la tripulación “estos días han sido muy duros para todos, velas rotas, Cicho en cama dopado y con los cuidados de Roger, todos seguimos su evolución y aunque tiene dolores poco a poco se ira recuperando, el resto de la tripulación vamos tirando todos con alguna magulladura de las barridas que nos pegan las olas en cubierta, pero contentos aunque muy cansados”. El buen humor y la moral alta del “Telefónica negro” se denotaba en su despedida “Bueno, ha llegado la hora de la comida, y hoy toca jamón serrano…
” El norteamericano Puma está teniendo problemas en su estructura. Ayer por la tarde un fuerte pantocazo les causo daños estructurales en proa, y durante la pasada noche se repitió la situación, esta vez con mayores consecuencias, al haber perjudicado el mamparo situado justo delante de la quilla, tal y como explicaba su patrón ken Read esta mañana :“A las 4:30 GMT volvimos a despegar con otra hermosa y “pequeña” ola, que desembocó en un nuevo “crack”. Esta vez no venía de la proa, sino de la sección central del barco, justo tras el mamparo de la quilla. Tres de nosotros estábamos desayunando y nos quedamos mirando unos a otros.No sólo se trata de una rotura en la estructura central del barco, sino que nos llevará más tiempo realizar una reparación –tal vez unas 24 horas–, y la solución será un poco más como ponerle una tirita, en comparación con la sólida reparación que pudimos realizar en los mamparos de la proa.
El constructor de barcos santanderino Cristóbal Piris, colaborador de la web volvooceanrace.es, explicaba así los daños estructurales en el Puma: “Parece que con el impacto de la ola de ayer, el mamparo longitudinal de proa quedó reventado. Pese a que lo solucionaron sobre la marcha, a bordo, lo que está claro es que esa zona esta dañada y es mucho más débil. El mamparo de la quilla y el mamparo del palo distribuyen todas las fuerzas estructurales y cargas máximas en el barco. Pensemos que el mamparo de proa es el “cuello” de esa espina dorsal. Si rompes el longitudinal de proa te quedas sin soporte”.
Pero ahí no acababa todo. Si inicialmente los males mecánicos en los barcos obedecían a velas rotas y problemas leves en timones o sistemas eléctricos, la rotura de botavara del irlandés Green Dragon fue un primer aviso, de que algunas rachas de viento y olas que en algunos momentos alcanzaban los cuatro metros de altura estaban teniendo efectos fatales.
A bordo del sueco Ericsson 3, el navegante Aksel Magdahl dijo que inundaron e barco cuando dieron contra una ola planeando a 35 nudos de velocidad: "El agua se metió dentro y llenó el barco casi hasta nuestras rodillas. Costó unos 20 minutos vaciar el barco, pero los equipos electrónicos parecen no estar bien".
Ian Walter, patrón del Green Dragon no perdía el humor en un mensaje enviado desde el barco irlandés “No ha sido una noche fácil para los chicos de cubierta, y además la temperatura desciende rápidamente. Abajo vamos empapados, y tenemos varias fugas de agua (una de ellas es el agujero que tuvimos que perforar para reparar la el timón). También tenemos fugas en la caja de una de las orzas, que se ha rajado. Parece que el barco está yendo bastante bien, pero somos vulnerables en los constantes chubascos, porque estamos obligados a navegar con la mayor izada a tope y no es fácil dominarla. Uno de los desafíos va a ser trasluchar. Todavía discutimos cómo
Las gripes, mareos y la habitual inadaptación inicial a la comida liofilizada parece que se van normalizando en la flota
El tripulante del Ericsson 4 Guy Salter comentaba su gripe y las malas condiciones para curarla: "Tuvimos algunos problemas con algunas velas hace unos días, pero ahora todo va bien a bordo", dijo ha estado en su litera desde la primera noche de la etapa cuando se le presentó una gripe que cree le contagió su hija. Acabo de tomar mi primera comida hace unas pocas horas. Hace bastante frío a bordo. Los chicos levan la mayor parte de la ropa puesta y se puede ver el aliento en el interior del barco".
Desde el “Telefónica azul” las cosas no están tan claras como en el “Telefónica negro”, sus ganas de victoria les hacer ser un poco más críticos consigo mismos tras estos cuatro duros días de regata a través del Océano Índico “se hace muy difícil escribir” exclamaba el cántabro Pablo Arrate. “Vamos a 30 nudos de velocidad pegando saltos de ola en ola” “Esta todo muy mojado, de nuevo no queda ni una esquina seca dentro del barco” “Estos dos últimos días han sido muy duros para todos”.
Las roturas de varias velas les da un trabajo extra nada agradecido en esas extremas condiciones de vida “al romper dos velas, Daryl y Jordi no han salido ha cubierta para poder repararlas, con lo cual quedamos solo ocho tripulantes”. “En cubierta hemos tenido que estar cinco tripulantes porque, al navegar con spi, hacen falta mas manos”. “Total que yo por ejemplo, hasta ahora, no he dormido ni siete horas al día y nunca mas de dos horas seguidas” La vida a bordo se ha hecho muy dura y extrema, Arrate describe como son sus 24 horas en el “Telefónica azul” “hacemos turnos de siete horas trabajando ,dos horas durmiendo y otras ocho trabajando”. “Estamos haciendo muchos cambios de velas por que el viento y la ola suben y bajan mucho. El viento va de 17 nudos a 40 nudos, por ejemplo, que nos entraron anoche” Tener que limpiar los filtros de la potabilizadora de agua, no es un trabajo de buen gusto, sobre todo si es por culpa de una ballena “hemos pasado justo por encima de una zona donde unas ballenas acababan de hacer sus necesidades con tan mala suerte que teníamos la potabilizadora en marcha. Los filtros se han ensuciado y el agua se ha contaminado. Limpiar filtros y hacer agua de nuevo”.
El capitán del barco, Bouwe Bekking, describía como se lesiono el francés Laurent Pages y realizaba una visión crítica de sus ultimas 24 horas, quizás un estado de rabia contenida al ver como sus compañeros de equipo conseguían rebasarles “Las últimas 24 horas han sido realmente duras, hemos hechos cosas incorrectas, y estábamos en una situación en la que parecía que intentábamos arreglar un fusible que nadie quisiera encender. El “Telefónica negro” está navegando realmente bien, y a lo largo de la noche llegó a pasarnos, hicimos un cambio de velas pero todavía seguimos lentos, hemos puesto rizos en la mayor y los hemos quitado… pero seguimos lentos, y lo peor de todo es que rompimos la vela mayor, no es grave, pero tuvimos que esperar a que fuera de día para repararla. Daryl Wislang subió con una driza y dos líneas de vida, pudo arreglar la vela como si estuviera sobre suelo plano.
En referencia a su menor velocidad, Bekking comentaba “parece que vuelve a suceder lo mismo que en la salida, es una situación muy rara. Ya no sé cuántas veces hemos chequeado la quilla, a ver si había algo enganchado, pero no vemos nada” “Otro percance es que Laurent [Pages] ha quedado fuera del sistema de guardias. Se golpeó con la protección de la rueda y se hizo daño en el hombro, estaba con la línea de vida, pero no en el lugar correcto. Afortunadamente puede mover el brazo, lo que a fin de cuentas significa que está bien. Está guardando reposo, y es lo mejor que puede hacer. Controlaremos qué tal está cuando vuelva a levantarse.” “Así que aquí estamos, con la moral un poco baja, sobre todo porque el resto de barcos van a buena velocidad.
Un día duro en la vida de un navegante oceánico”. P
arte de posiciones a las 17:30 horas
1- Puma, a 3.275 millas de Cochin
2- Telefónica Azul, a 20 millas del líder
3- Ericsson 4, a 27 millas del líder
4- Ericsson 3, a 33 millas del líder
5- Telefónica Negro, a 35 millas del líder
6- Delta LLoyd, a 67 millas del líder
7- Green Dragon, a 96 millas del líder
8- Team Russia, a 99 millas del líder