Declaraciones tripulantes Telefonica azul a su llegada a Ciudad del Cabo

IKER MARTÍNEZ, patrón del Telefónica azul.
Hondarribia (Guipúzcoa), 16/06/1977
Segunda participación en la Volvo Ocean Race

“La etapa ha estado bien, pero si la regata hubiese durado una semana más seguro que hubiésemos mejorado también más. El resultado deportivo no es el que esperábamos, pero bueno, hemos llegado, todo el mundo está bien, el barco está bastante bien y eso es un buen síntoma”.

“Hemos tenido todo tipo de condiciones: vientos medios, ligeros y fuertes y nos ha servido para saber dónde estamos. Este quinto puesto no es nuestro objetivo porque tanto el equipo como el barco tienen mucho potencial y podemos mejorar muchísimo”.

“También hemos sacado muchas cosas positivas de esta etapa: el barco y el equipo funcionan muy bien. Ahora es tiempo de estar con nuestras chicas y analizar las cosas para ver qué se puede mejorar”.

“Personalmente me quedo con todo. Ha sido un experiencia dura, bonita y también muy positiva”.

PEPE RIBES, proa del Telefónica azul.
Benissa (Alicante), 19/06/1971
Tercera participación en la Volvo Ocean Race

“Nos queda mucho trabajo por hacer. Hemos tenido que apretar mucho navegando y a pesar de apretar y ser una etapa con mucho estrés no hemos obtenido grandes resultados. Por lo menos hemos aprendido que tenemos que mejorar en condiciones como las que hemos tenido esta última semana, de popa cerrada y con mucho viento. En estas condiciones no podíamos seguir a los líderes”.

“De esta etapa me quedo con que nos ha servido como un entrenamiento. Realmente para nosotros la primera etapa va a ser la segunda en realidad, sabiendo lo que ahora sabemos tras de estos 23 días”.

PABLO ARRARTE, trimmer del Telefónica azul.
Santander, 11/11/1980
Primera participación en la Volvo Ocean Race

“La primera etapa ha sido más larga de lo que esperaba. No por el tiempo en sí, sino porque en algunas ocasiones el tiempo pasaba muy despacio, sobre todo durante la parte del Ecuador que había poco viento. Luego con más viento todo ha sido más divertido. En general ha sido una gran experiencia, muy divertido, aprendiendo mucho y llena de buenas experiencias”.

Acerca de qué le ha sorprendido más: “Me ha sorprendido gratamente la convivencia a bordo, entre los 11 de a bordo no ha habido ningún problema. Otra cosa que me ha sorprendido han sido las olas tan grandes. Yo nunca había navegado ni tanto tiempo en alta ni tan al Sur. Por la noche la navegación impresiona un montón, pero a la vez es muy divertido”.

“Lo que más me apetece ahora es comer bien. Primero: comer, porque a lo de estar sucio ya estoy acostumbrado (risas)… Lo que toca es ducharnos, descansar, comer bien y en un par de días empezar a preparar la segunda etapa”.

JORDI CALAFAT, trimmer/caña del Telefónica azul
Palma de Mallorca, 24/06/1968
Primera participación en la Volvo Ocean Race

“Lo que me ha sorprendido más quizás es el barco y los problemas que hemos tenido para ir popa y con mucho viento. Nos costaba mucho igualar la velocidad de los que iban primeros. Intentamos forzar pero veíamos que no era posible y que navegábamos muy al límite. Quizás hubiésemos tenido que entrenar un poco más con estas condiciones. Pero bueno todo se puede mejorar y seguro que más adelante tendremos condiciones que serán más optimas para nosotros”.

“Hemos tenido todo tipo de condiciones. Popa con poco viento hasta los doldrums, donde tanto el Telefónica Negro como nosotros éramos de los rápidos e íbamos bien. Después de través hasta Fernando de Noronha, donde también fuimos muy bien. Cuando empezamos con los rumbos de popa ya no fue tan fácil y perdíamos millas”.

“Lo que más me apetece ahora es ver a la familia y estar unos días con ellos y prepararnos para la próxima etapa que sale dentro de 10 días”.

GABRIELE OLIVO, tripulante de comunicación del Telefónica azul.
Belluno (Italia), 31/03/78
Primera participación en la Volvo Ocean Race

“Para los tripulantes de comunicación la regata es psicológicamente muy dura, ya que no puedes ayudar en nada a tus compañeros, no puedes ni mover una vela. Además, hay que pensar que uno sólo puede andar unos 60 metros al día, vas de cubierta a tu litera. Imaginaos: 23 días moviéndote sólo 60 metros al día. A ver que pasa cuando mañana vayamos al gimnasio…”