Última tecnología para seguir los barcos del equipo Telefónica en la Vuelta al Mundo
En la última Vuelta al Mundo fueron millones de personas las que siguieron la regata día a día. En esta nueva edición, la organización está dispuesta a superar su propio récord a toda costa; y para ello el tripulante número once, que será el encargado de narrar desde el barco la aventura más extrema, tendrá a su disposición la tecnología más avanzada. Mikel Pasabant y Gabriele Olivo, tripulantes de comunicación del “Telefónica Negro” y del “Telefónica Azul”, respectivamente, son los principales encargados de contar cómo viven once tripulantes alrededor del mundo.
No se escapará nada. Todo cuando ocurra en cada barco quedará grabado, pasando así a formar parte de la historia de la Volvo Ocean Race 2008-2009. El "Telefónica negro" y "Telefónica azul", al igual que todos los Volvo Open 70 en la competición, está obligado a llevar cinco cámaras fijas de alta definición y dos móviles; asimismo, repartidos a lo largo de cada embarcación, se colocarán tres micrófonos fijos que recogerán el impactante sonido de estos barcos, mientras que los regatistas tendrán a su disposición dos micrófonos más con tecnología inalámbrica
La cámara situada en la popa será una de las que recoja las imágenes más impactantes; no en vano en su ángulo estarán las dos ruedas con las que se "conducen" estos bólidos del mar. El mástil también será otra de las zonas a tener en cuenta. Allí habrá instalada otra cámara que aportará una visión total el barco y a la altura de la primera cruceta habrá instaladas dos cámaras más.
Como si del Gran Hermano se tratara, los tripulantes no tendrán descanso ni en el interior de la embarcación; y es que en la mesa del navegante se situará la quinta cámara de alta definición. Con un sistema totalmente innovador y gracias al satélite Inmarsat se subirá el material multimedia generado hasta el momento. Audios, videos, fotos y escritos que desde la organización y desde el equipo Telefónica se darán a conocer al público. Desde la mesa del tripulante de comunicación, éste podrá controlar todas las cámaras instaladas en el barco gracias a un joystick.
Todo está perfectamente pensado para que nada caiga en el olvido, de manera que si se diera la circunstancia, sería posible activar un sistema de grabación automática presionando el llamado Crash button o botón de emergencia.