Las mismas personas con distintas corbatas en las elecciones federativas, o, el que la hace una vez la puede hacer cientos.
La actual convocatoria electoral demuestra la nula renovación en la dirección de la Vela española.
No deja de sorprender lo que sucede en la vela española, de lo que nadie se escandaliza (o extraña), la cruda realidad es que en la sociedad española viene sucediendo desde hace tiempo, ya por años 20 del 1800 se cuenta que cuando Fernando VII pasaba revista a un nuevo cuerpo el Rey descubrió en él muchas caras que le eran familiares de la milicia liberal, entonces comentó de forma irónica, la frase que se le atribuye: “A lo que veo son los mismos perros con distintos collares”
Esta frase tomó forma y se hizo popular para indicar el desencanto producido en la supuesta renovación de una situación cuando la realidad es que se mantienen los mismos defectos que anteriormente
Cuestión que también Don Benito Pérez Galdós recoge en su novela ‘El Grande Oriente’
Pues bien, todos los posibles candidatos que se presentan para dirigir la Vela española en los comicios recién convocados han sido miembros de la directiva de Casanueva, siendo algunos de ellos los principales promotores de la misma al cargo; otros, también lo fueron de anteriores directivas, con lo que poco o nada pueden estos aportar a la Vela, sino más de lo mismo, y todos conocemos las gestiones de las últimas legislaturas en las que ellos han tenido responsabilidades.
El vicepresidente económico con Casanueva, hoy candidato, fue corresponsable en la gestión y justificación de las subvenciones recibidas del Gobierno de Cantabria para la tecnificación de Deportistas Cántabros, las cuales fueron tan irregulares que acabaron siendo revocadas en su mayoría por el propio Gobierno de Cantabria, que obligó a la RFEV a que devolviese gran parte de las subvenciones concedidas por este concepto, en las que las del 2017 fueron justificadas con facturas inexistentes, lo que el Vicepresidente económico permitió se hiciese, bien por acción u omisión, con lo que se convirtió en colaborador en esa irregularidad, que obligó a devolver el dinero cobrado y gastado, lo revocado por el gobierno de Cantabria, con fondos de otro ejercicio, con el importante quebranto económico para el ente federativo, lo que no le causó ningún rubor, demostrando con ello su permisividad para que esos hechos se sucedieran a lo largo de 4 años. Si esto sucedió, y obligó al Gobierno de Cantabria a tomar la resolución de revocar parte de las subvenciones de 4 años, ¿qué otras cosas no habrán podido suceder en el RFEV con estos directivos que ahora se presentan a dirigirla de las que no se ha tenido conocimiento?
J.F.M.J.O.