La RFEV, una nave sin rumbo. Aclaraciones por escrito de Toni Ripoll a la gestión del equipo olímpico
Palma de Mallorca a 19/07/2015 A pocas horas de salir de viaje a Río de Janeiro, de donde no se cuando ni en que condición voy a regresar y leídas las continúas y persistentes amenazas de rescisión de mi contrato como Director de Preparación Olímpica de la RFEV; deseo manifestar mi total repulsa a las actuaciones, declaraciones y manifestaciones que contra mi persona se han difundido desde la propia Federación en diferentes medios de comunicación y en la propia página web institucional.
Es obvio que desde la Directiva de la RFEV han emprendido una cruzada política que puede traer consecuencias y daños colaterales en el aspecto deportivo. En este sentido, creo que se está perjudicando seriamente al Equipo Olímpico, no ya en lo económico al reducir las ayudas de este importante año preolímpico; sino en lo fundamental, por cuanto esta situación no permite centrarse totalmente en su preparación, dadas las continúas noticias inciertas que reciben vía correos electrónicos, redes sociales, prensa escrita etc...
En la presentación del Mundial de S2014, manifesté mi malestar por la poca importancia que se estaba dando al Equipo Olímpico en favor del propio evento y de las atenciones para con otros aspectos diferentes al deportivo. Por ello recibí una llamada desde el Ayuntamiento de Santander de quien hoy considero una persona amiga.
Reflexionando posteriormente me di cuenta que era a la propia Federación a quien yo le estaba reclamando más atención... Todos esperábamos que finalizara el año 2014 y el Mundial para poder centrarnos en lo deportivo a partir de 2015. Pero lo cierto y preocupante es que cuando todos esperábamos mayores recursos económicos y humanos para el Equipo Olímpico en el año preolímpico, la RFEV con el presunto y probable objetivo de saldar las cuentas pendientes del Mundial 2014, propone la erradicación del equipo pluridisciplinar y la reducción del presupuesto de actividad deportiva en un 46% respecto a 2014; aún recibiendo una mayor subvención del CSD.
Hay que significar que más de un Cub Náutico destina mayor cantidad de dinero a sus equipos juveniles y que gracias a ello estos deportisats pueden continuar compitiendo en Mundiales y Europeos. Así, en mi respuesta a tal solicitud de recorte presupuestario, escribí al Secretario general de la RFEV: “Comprenderás que este proyecto de presupuestos es totalmente inaceptable, tanto para mi como para el equipo de Técnicos, Profesionales y Deportistas que dirijo; y muy posiblemente, por las consultas realizadas, no fuera aprobado por la Asamblea General de la RFEV” (como así ha sucedido).
Más adelante añadí: “Me veo en la obligación de defender a mi equipo y por tanto en la necesidad de advertir a la Asamblea de la Real Federación Española de Vela, que esta propuesta pone en peligro la continuidad del actual proyecto olímpico y en serio riesgo de abandono deportivo de algunas tripulaciones” (lo cual hice y continuaré haciendo).
Con esta forma de pensar de nuestros dirigentes, no es de extrañar que en la pasada Asamblea General Ordinaria del 6 de junio, desde la mesa presidencial se dijera que dados los compromisos salariales y gastos asociados al mantenimiento del patrimonio inmobiliario de la RFEV, el único presupuesto que podía ser reducido era el correspondiente a la actividad deportiva.
Así empezó la crisis institucional actual...
Los hermanos Rodriguez se equivocan al defender y tratar de comparar los honorarios de los profesionales de la Vela con los sueldos Directivos.
En primer lugar porque la profesionalidad de los técnicos es indiscutible y no necesita ser aprobada en ninguna Asamblea. Se asocia a su propio curriculum deportivo, contrastado por resultados y sus méritos a lo largo de su trayectoria profesional.
Cuando los miembros de la Asamblea de la RFEV empezaron poner en duda la condición profesional del Presidente y a cuestionar su elevado salario y coste empresarial en comparación con los logros de su gestión al frente de la RFEV; a nuestros directivos, no se les ocurre otra idea que publicar en la página web de la institución mi contrato de prestación de servicios. Todo ello, al amparo de la Ley de Transparencia, ¡claro!. El objeto de dicha publicación no era otro que hacer notar al federado, que el sueldo del Presidente no era tan elevado en comparación con el del Director de Preparación Olímpica. Sin entrar en detalles, dicha comparación no se acerca a la realidad en absoluto, por cuanto:
1º) El coste empresa del DPO es exactamente la cantidad establecida en el contrato, por tratarse de un contrato de prestación de servicios, mientras que al los sueldos del personal trabajador por cuenta ajena o laboral, caso del Presidente, hay que añadirle los costes de la Seguridad Social, lo que supone aproximadamente un 30% más.
2º) Dadas las necesidades materiales de la RFEV, el contrato del DPO contempla una cantidad anual, que responde a la utilización de sus propios medios (vehículo tractor, remolque y embarcación neumática) para el desempeño de sus funciones.
3º) El DPO no obtiene rendimientos en especie de la RFEV, tales como coche y casa institucional a su disposición, gastos de teléfono asociados a la actividad, ordenadores personales, tarjetas de crédito, alojamientos y dietas de manutención en el mismo municipio de su lugar de trabajo.
Hasta hace pocos días, este único contrato estuvo abiertamente publicado en la web de la RFEV con la posibilidad de ser descargado desde cualquier ordenador.
Sucedió que desde el CSD advirtieron a la RFEV que tal publicación infringía la LOPD ya que no debe figurar tanto el NIF como la dirección postal de las personas físicas, por lo cual fue retirado hace escasos días. Pero lo grave de este asunto no es la irresponsabilidad profesional de dicha publicación, sino el hecho de que no se haya publicado ningún otro contrato. Desconocía lo que era ser transparente hasta que alguien lo escribió sin “s”: trampa-rente o trampa recurrente...
Ya en la reunión de Madrid del 21 de enero (solicitada por mi con el fin de buscar alternativas a los recortes propuestos), pedí explicaciones a cerca de un contrato de cesión de logotipo de la RFEV a la empresa Aerolite SL y como era posible que tal cesión no hubiera sido propuesta a la aprobación por parte de la Asamblea General de la RFEV (ya que el logotipo es patrimonio de la Federación).
Pues al parecer, a éste y tantos otros contratos no les es de aplicación la Ley de Transparencia; es decir son opacos a los Directivos, al Asambleísta, al CSD y a los ojos de cualquier ciudadano español federado. Por ello, para muchos asambleístas están bajo sospecha...
Un misterio por aclarar en la federación es la procedencia de la primera nota de prensa que afirmaba la rescisión de mi contrato como DPO y la sustitución por parte de Alejandro Abascal y Santi López-Vázquez. No creo equivocarme a cerca de su procedencia simplemente por la faltas de ortografía que ésta contiene. Lo que a todos nos deja perplejos es la publicación de esta noticia y el anterior y simultáneo e-mail de ambos técnicos argumentando diferentes razones por las que no aceptaban el cargo. A partir de aquí, las continuas noticias sobre mi cese, rescisión, destitución, sustitución, etc... aparecen por diferentes páginas web y blogs.
Ante ello no me queda otra alternativa que pedir explicaciones, manifestar mi desaprobación y solicitar la oportuna rectificación a la RFEV. Lo hice por dos veces en sendos burofax. En el segundo de ellos, concedí a la RFEV un plazo de cinco días para que publicara la realidad de mi situación y eliminara la huella digital de las falsas noticias publicadas. Hoy 19 de julio, vencido el plazo temporal, no se ha producido; por lo que he decidido dar publicidad a este escrito y al contenido de los dos anteriores.
De entre todas las calumnias recibidas en distintas comunicaciones provenientes del correo electrónico anónimo-misterioso de nuestra institución: “prensa@rfev.es” y en concreto las difundidas por la agencia “Europa Press”, las más dolorosas son las que se refieren al Circuito Olímpico Español de Vela (COEV) del que se me acusa de haberlo boicoteado desde el principio; cuando he sido yo el impulsor de este proyecto y así lo saben tanto deportistas y técnicos como los propios clubes náuticos organizadores.
De otra parte, la petición de renovación del equipo con juveniles; no sólo es un hecho que me atribuyo sino que ha sido considerado por los propios los técnicos de todas las FFAA, como una de las mejores medidas para incentivar y promocionar a los nuevos talentos deportivos, quienes me consta lo agradecen.
Ambas ideas están reflejadas en la Guía Deportiva elaborada por mi como Director de Preparación Olímpica.
Para finalizar, y dejando a un lado el tema personal regresando al terreno deportivo, deseo manifestar nuevamente mi invariable postura de defensa del equipo técnico y deportivo al cual tengo el honor de dirigir. Ello, lo resumo en una frase histórica adaptada al caso: “YO, NI QUITO NI PONGO PRESIDENTE, SOLO AYUDO A MI EQUIPO”
Toni Ripoll Director de Preparación Olímpica RFEV