LA VELA Y EL REFRANERO ESPAÑOL.

Y digo esto porque es indudable que nuestra Federación ha pasado de la grandeza en la que la situó Arturo Delgado, porque no hay que olvidar que bajo su mandato era una federación con prestigio internacional, excelente funcionamiento y una más que holgada situación económica, apoyada con buenos patrocinadores, realmente dejó un patrimonio envidiable, a una situación que ya no goza de aquel prestigio y lo que es peor, totalmente arruinada, situación que desgraciadamente a los rectores del Deporte español poco o nada les ha importado a pesar de las denuncias habidas.

Durante un tiempo hubo posibilidad de enderezar el rumbo, primero con Manolo Nadal, persona que los que lo conocemos sabemos que indudablemente hubiese sido capaz de revertir el desastre y llevar a la Federación al lugar que le corresponde; posteriormente apareció en el horizonte Francisco Coro, que también hubiese podido frenar la cada vez más decadente marcha de nuestra Federación, pero se dio la circunstancia de que ambos perdieron incomprensiblemente las elecciones, y digo incomprensiblemente porque en ambas elecciones hubo más que claras sospechas de haber sido manipuladas.

Pero nuevamente emerge en el horizonte un nuevo candidato capaz de revertir la situación, me estoy refiriendo naturalmente a Jesús Turró, persona involucrada en el deporte de la Vela a lo largo de toda su vida y que cuenta con la ventaja de conocerla por los dos lados, es decir como deportista y como directivo.
Personalmente tengo el recuerdo de él de que junto a Ion Echave fueron dos de los pilares fundamentales en los que Arturo Delgado se apoyó para conseguir el fantástico éxito de Barcelona ‘92, algo que ninguna otra federación jamás en el mundo ha conseguido.

Frente a Jesús Turró tenemos a la señora Casanueva, vicepresidenta con el nefasto señor José Ángel Rodríguez, al que le presentó una moción de censura que ganó, con la promesa de que no se presentaría a unas nuevas elecciones y supuestamente aclarar el origen de las deudas de la federación y la desaparición de los bienes de la Fundación que Arturo había dejado.

En este caso tengo que recurrir al Evangelio, lo debió de decir Jesús: Por sus obras los conoceréis, y por las obras de la señora Casanueva lo que concluyo es que la moción de censura en realidad se trató de un “quítate tú para ponerme yo”, pueda que incluso para que no se aclarase nunca lo sucedido en el período del señor Rodríguez, quien sabe, porque no hay que olvidar que ella era su vicepresidenta, así que al final las cuentas no se han aclarado y me dicen y leo que está manipulando las elecciones, parece que se ha olvidado de su promesa y quiere continuar en el cargo por encima de todo.

Y aquí es donde me pierdo.

Intento recurrir al sabio refranero y cuando recuerdo que “a la tercera va la vencida”, pienso que la Asamblea votará con sentido común y que Jesús Turró iniciará la recuperación de nuestra Federación.

Pero no puedo sustraerme al recuerdo de “no hay dos sin tres” y me temo que pudiera suceder que al igual que a Manolo Nadal y a Francisco Coro, a Jesús Turró también le birlen las elecciones, algo que con la actual Ley del Deporte parece resulta demasiado fácil para los que manejan la junta electoral.

Eugenio López Santos.