El navegante aragonés Luis Miranda Ortiz afrontará el reto de dar la vuelta al mundo a vela sin escalas
El navegante aragonés Luis Miranda Ortiz ha presentado el proyecto, que realizará en octubre, de la vuelta al mundo a vela sin escalas. Con salida y llegada en San Carlos de la Rápita (Tarragona), el navegante recorrerá los principales océanos del mundo tripulando la embarcación "Pilar Ortiz", nombre que puso en honor a su madre.
La vuelta al globo sin escalas ni combustible fósil y en un barco de menos de 30' es la meta que tendrá que afrontar Luis Miranda si quiere formar parte de la élite de navegantes que han conseguido lograr este objetivo.
"Este viaje es uno de los pocos que se ha hecho sin escalas y sin la utilización de combustibles fósiles. Si en un momento dado necesito un motor, tendré que utilizar la energía solar", ha declarado Miranda que ha querido dejar claro que "es la primera vez que se hace con un barco tan pequeño porque sólo tiene ocho metros y eso es lo que diferencia otros proyectos, además de que yo no soy un navegante profesional".
La ruta tiene otro objetivo que es unir el delta del Ebro y los tres grandes cabos, Buena Esperanza, Lewin y Hornos, aproximadamente una 30.000 millas . "Queremos que el delta del Ebro empiece a tener un peso en la historia de la navegación. Evidentemente nunca podrá tener el prestigio que tienen otros pero de esta forma colaboramos un poco en que pueda empezar a tener importancia", ha añadido Miranda. Se ha calculado que la duración del viaje será de más o menos un año, todo depende de las condiciones que me encuentre en el mar", ha comentado Miranda.
El navegante aragonés tiene claros los objetivos del viaje. En primer lugar, se ha encontrado muchas dificultades para poder empezar con el proyecto. El poco conocimiento que hay en España sobre la vela no deja muchas opciones para patrocinios para este tipo de viajes. Por ello, ha necesitado ayuda para poder habilitar el barco para el trayecto y para el abastecimiento de comida y bebida. Otro de los objetivos es el querer divulgar una forma distinta de navegación. Lo que pretende Miranda es "acercar a la gente la vela" y "quitar la imagen de la gente rica de la navegación".
Además, quiere intentar que la vela tenga una "tradición marinera" que no tiene mucha vigencia en España y que sí tiene "en países como Francia e Inglaterra". Para finalizar, Miranda quiere demostrar que se puede "combatir el cambio climático demostrando que es posible hacer un viaje de estas características sin combustibles fósiles" y, además, va a llevar en el barco unos diseños para la investigación para aumentar la seguridad en los barcos.
Por último, ha querido resaltar que él hace este viaje también por motivos personales. "Cualquier persona que haga un viaje de este tipo sabe de la importancia de tener unos motivos y por eso se convierte en un sueño para mí. Además, hay una serie de asuntos personales que me llevan a afrontar esta nueva etapa de mi vida".