El Puerto Deportivo Pasito Blanco recibe a las primeras embarcaciones de la ARC
Poco a poco van llegando los barcos a los puertos grancanarios para ultimar su puesta a punto antes de iniciar la regata transoceánica
El Puerto Deportivo de Pasito Blanco registra por estas fechas un ir y venir constante de embarcaciones que arriban al puerto sureño para ultimar su puesta a punto cuando falta un mes para la salida de la 27º edición de la Atlantic Rally for Cruisers (ARC), el evento náutico oceánico más importante del mundo, que dará el pistoletazo de salida el próximo 25 de noviembre.
Poco a poco van llegando los 247 barcos participantes a las costas grancanarias para ir preparando el largo trayecto y aprovisionándose para los 20 días de navegación. Uno de los puertos que da cobijo en estas fechas a las embarcaciones que tomarán parte en la ARC es el Puerto Deportivo Pasito Blanco, que cuenta en la actualidad con 388 puntos de atraque para barcos desde 6 hasta 40 metros de eslora, así como 80 plazas de Marina Seca, convirtiéndose en el único de Gran Canaria en ofrecer este sistema.
Situado en un enclave estratégico del municipio de San Bartolomé de Tirajana, el Puerto Deportivo de Pasito Blanco se ha situado a la vanguardia en cuanto a los servicios que ofertan, convirtiéndose en el lugar perfecto para la puesta a punto de los barcos que hacen escala en la Isla antes de iniciar su travesía transatlántica.
De hecho, además de los barcos que vienen para participar en la ARC, por el puerto sureño pasan a lo largo del año cientos de navegantes que vienen de países del norte de Europa, como Alemania, Holanda, Inglaterra, Rusia…, además de americanos, y que dejan sus embarcaciones por largas temporadas en Pasito Blanco, en periodo de hibernaje, antes de iniciar su vuelta a casa o un largo viaje hacia el Caribe, si bien, algunos acaban fijando aquí su punto de atraque permanente.
Pero antes del viaje, el barco ha pasado por un exhaustivo proceso de reparación o puesta a punto en Pasito Blanco, que posee una amplia explanada de varada de más de 8.000 metros cuadrados. El varadero dispone de un travelift de 64 toneladas y hasta 22 metros de eslora, una grúa fija para 2 toneladas y una carretilla elevadora o ‘toro’, con capacidad para tres toneladas y única en Canarias con elevación negativa al mar. Sus instalaciones son utilizadas por todo tipo de embarcaciones, pudiendo realizarse en la misma todos los servicios que sean necesarios, como mantenimiento y limpieza de cascos, antifouling, tratamientos de osmosis, reparaciones de fibra y madera, inspecciones técnicas de embarcaciones, mecánica general, mecánica de motos de agua y fuerabordas, velería, electricidad y electrónica, entre otros.
Para ello, cuentan con un amplio equipo humano, en constante formación tanto en las últimas técnicas de reparación de barcos como en prevención de riesgos laborales, formado por 16 personas fijas, además de más de 10 empresas directas que ofrecen sus servicios de pintura, velería, tratamientos de osmosis o electrónica, entre otros.
Además, el Puerto Deportivo cuenta con una vigilancia de 24 horas y todos los puntos de atraque disponen de electricidad y agua. El visitante también puede encontrar servicios de baño y duchas, supermercado, restauración, información meteorológica y estación de servicio, que suministra combustible y lubricante a las diferentes embarcaciones. Toda esta oferta incluye también excursiones turísticas a motor o a vela, pesca deportiva, escuela de buceo, zona de baño dentro de la Punta Yacht Club, solarium…
A lo largo de todo el año, el tráfico de barcos por sus instalaciones es constante, no en vano, es el único puerto de Canarias que ofrece un servicio integral. “En un mismo mostrador, el cliente puede contratar todos los servicios que necesita su barco, desde reparación, mantenimiento, limpieza, hasta lavandería de los tapizados”, comenta el director del Puerto, Francisco Torres.
Respetuoso con el medio ambiente
El Puerto Deportivo Pasito Blanco se preocupa, además, por el medio ambiente, un trabajo que ha sido reconocido desde el año 1993 con la concesión de la Bandera Azul, una distinción que la Fundación para la Educación Ambiental (FEEE) entrega a aquellas playas y puertos deportivos de Europa en donde se promueve la limpieza y la seguridad, la educación ambiental y la acción colectiva por la protección del medio ambiente litoral.
El galardón Bandera Azul se basa en el cumplimiento de una serie de criterios específicos en las playas y puertos galardonados, que se agrupan en torno a cuatro pilares básicos: calidad de las aguas de baño, información y educación ambiental, gestión medioambiental, y seguridad y servicios.