“Top 10” para los tres representantes del RCNP en el Campeonato del Mundo de Piragüismo

La gran sorpresa la ha dado la canoísta Adriana Paniagua, que se ha clasificado novena en la distancia olímpica de C1 200, un resultado que ella misma no se esperaba y que la sitúa como la referencia nacional en su categoría.

Adriana ha sido la única de los tres deportistas del RCNP que ha participado en dos clases distintas. Ayer sábado fue octava del mundo en C2 500 junto a su compañera del Club Cisne de Valladolid Patricia Coco y consiguió, contra todo pronóstico, el pasaporte para la final del C1 200, donde esta mañana ha sido novena, parando el cronómetro en 49:457 y demostrándose a sí misma que puede estar por debajo de la barrera psicológica de los 50 segundos. La victoria mundial ha sido para la canadiense Lawrence Vincent-Lapointe con un impresionante registro de 45:478.

Objetivo cumplido

“Sabía que no tenía ninguna posibilidad de estar en el podio, tanto por tiempos como el gran nivel de mis rivales, y por eso he decidido salir a muerte. No me jugaba nada, así que he pensado en darlo todo desde el principio. He salido muy bien y he estado cuarta una buena parte de la carrera, hasta que he pinchado y he perdido posiciones. Pero estoy contenta. Ya lo estaba por el hecho de estar en la final. Creo que he sido la gran sorpresa y doy por cumplido mi objetivo en este mundial”, ha explicado Paniagua nada más concluir su regata.

Alicia Heredia, octava en la final del K4 500 femenino, también ha brillado con luz propia en la República Checa. Su posición entre las mejores del mundo la convierte, junto a Adriana, en una de las grandes bazas olímpicas del deporte mallorquín. Si ambas mantienen o mejoran el nivel actual y obtienen plaza para los Juegos de Tokio, la sección de piragüismo del RCNP habrá alcanzado un hito histórico. “Es muy pronto para hablar de los JJOO, pero está claro que Adriana y Alicia están en un buen nivel y generan una gran expectativa”, ha declarado Juan Juan Barceló, entrenador de piragüismo del Real Club Náutico de Palma.

La final de K4 500 femenino estuvo claramente dominada por el equipo de Hungría, que se colgó el oro con un tiempo de 1:29:784. La tripulación española, formada por Sara Ouzande, Alicia Heredia, Isabel Contreras y Begoña Lazkano, mantuvo el tipo hasta los 250 metros, pero fue perdiendo fuelle en el segundo tramo, marcando un tiempo de 1:35:384 para la octava plaza.

Por último, el piragüista Adrián Castaño, que compite en la clase KL1 para personas con discapacidad, logró el noveno puesto en la final disputada el pasado viernes, en una carrera de altísimo nivel.