Pesca de río al lanzado ligero

Al contrario de otras modalidades, el lance ligero nos permite poner distancia entre el pez y el pescador de forma que nuestra silueta, o los posibles ruidos que realicemos no lleguen al pez, o lo hagan con debilidad. Cucharillas, peces articulados, moscas y vinilos; todo éste mundo de cebos artificiales puede usarse con el lanzado ligero. Material ligero para una pesca dinámica.
La pesca actual puede definirse más, como la búsqueda del pez, que como su espera. Es decir, que es el pescador quien debe buscar la trucha. Este nuevo concepto de andar, subir, vadear ha revolucionado el concepto del peso del equipo. Cañas que apenas pesan cincuenta gramos, carretes con velocidad de recogida de 1/6 en grafito, son algunos ejemplos del material necesario para enfrentarse a una larga y completa jornada de pesca.
De acuerdo con el río y su entorno, el largo de la caña puede oscilar entre un metro, para llamada pesca de ballesta, hasta los 2,70 para un aparejo de cuatro moscas. El tamaño y capacidad del carrete debe estar en consonancia con la caña, asi como su peso, que no debe desequilibrar el conjunto.
Personalmente recomiendo las cucharillas como cebo para iniciarse, son fáciles de usar y de atar, pero debe ser el profesional de su tienda quien decida que darle para cada temporada, al igual que podrá hacerle otras recomendaciones sobre equipos y lugares de pesca.
No lleve ropas pesadas, vístase como lo haría para caminar mucho. Olvídese por el momento de los vadeadores que llegan hasta el pecho, ( los usaremos más tarde cuando pesquemos ríos grandes con mosca) nos servirán perfectamente las clásicas botas que terminan en la ingle. No lleve nunca camisas de manga corta y no se olvide de un sombreo o una gorra, el sol en abundancia no es recomendable.