Buceadores de Oceana descubrieron anteayer una docena de cadáveres de focas grises en el fondo marino del islote Bogskär,
Buceadores de Oceana descubrieron anteayer una docena de cadáveres de focas grises en el fondo marino del islote Bogskär, al sur de las Islas Åland, un archipiélago finlandés situado entre este país y Suecia. Los buceadores, que documentaron gráficamente el hallazgo, forman parte de un equipo de Oceana a bordo del buque de investigación Hanse Explorer, actualmente en una expedición de dos meses en el Mar Báltico.
Los cuerpos de los animales, de alrededor de 6 meses de edad, aparecían a unos 7 metros de profundidad, a unos 20 metros de distancia del islote. En uno de los casos, al menos, una foca de menor edad estaba acompañada del cadáver de un ejemplar adulto.
Bogskär es una roca aislada (skerry) en el centro del Báltico a una distancia de 60 kilómetros de la costa más cercana. En ella se yergue solamente un pequeño faro automático dotado de una plataforma para aterrizaje de un helicóptero. En Bogskär reside una pequeña colonia de focas grises, compuesta por un par de docenas de ejemplares. Durante la presencia de los buceadores de Oceana el resto de la colonia parecía dinámica y en buen estado de salud.
Las causas de esta mortandad, de indudable impacto para el reducido tamaño de la colonia y por la edad de los ejemplares afectados, no han podido ser determinadas todavía. Los animales no parecían estar afectados por problemas de desnutrición, ni sufrían ningún daño físico aparente. No había evidencias de disparos ni de daños traumáticos. Tampoco se observaron señales de artes de pesca en los cuerpos, aunque no se puede descartar la hipótesis de su posible enganche y ahogamiento en trasmallos que hubiesen sido posteriormente retirados sin dejar huella. Los especialistas consultados dudan de que se pueda tratar, en esta época del año, de un proceso de intoxicación por algún tipo de alga tóxica. Una epidemia por algún tipo de virus podría, sin embargo, ser otra hipótesis.
El equipo de Oceana se ha puesto en contacto con varios expertos finlandeses en focas para determinar las causas de la muerte e intentar evitar en el futuro este tipo de episodios.
Oceana está llevando a cabo, por segundo año consecutivo, una expedición en el Báltico, con el objetivo de recopilar información para dar fuerza a sus propuestas de ampliar la red de áreas marinas protegidas en este mar hasta el 30%, y para contribuir a mejorar la gestión pesquera en la región, acabando con la sobrepesca y la pesca ilegal.
“El medio marino está severamente dañado en el Báltico. Situaciones como la documentada por Oceana en Bogskär deben ser investigadas para conocer las razones que causaron las muertes”, afirma Hanna Paulomäki, científica marina y Project Manager de Oceana en el Báltico. “Posiblemente, una mejora en la gestión de todo el ecosistema, junto con la reducción constante de los aportes de sustancias dañinas y nutrientes, evitaría este tipo de incidentes. Las medidas para recuperar el Báltico pasan también por la creación de una red de áreas marinas protegidas ecológicamente coherente y una mejor gestión de los stocks pesqueros”.