Una marea roja tiñó ayer el litoral de la Ría de Vigo
En una muestra recogida en medio de la mancha por investigadores del Centro Oceanográfico de Vigo se contabilizaron unas 1630 células/mL de Noctiluca, organismo responsable de esta marea.
Vigo, 13 de agosto de 2020. En fechas recientes se han observado mareas rojas no tóxicas en las Rías de Vigo y Pontevedra con un tono anaranjado intenso, que resulta muy espectacular cuando se acumulan en la orilla de las playas. El organismo responsable de estas mareas es un dinoflagelado heterótrofo inocuo, Noctiluca scintillans, que posee una limitada capacidad de movimiento y desarrolla proliferaciones de forma habitual durante el verano en las rías gallegas, a menudo entre julio y septiembre. Se dispersan y concentran a merced de las corrientes superficiales y durante esta época las condiciones ambientales (estabilidad y mayor temperatura) y la abundancia de alimento (plancton) producen que sus poblaciones crezcan hasta el punto de teñir el agua de mar.
Su tamaño suele rondar entre 0,5-1 mm y puede verse a simple vista como bolitas diminutas que flotan en el agua. Poseen un único flagelo de gran tamaño y en el interior se aprecian a menudo los restos de presas de las que se alimenta: toda clase de microorganismos planctónicos, incluyendo fitoplancton (diatomeas, otros dinoflagelados, etc) y microzooplancton. No es tóxica ni realiza fotosíntesis, pero sí contiene compuestos anaranjados (carotenoides) que dan color a sus proliferaciones.
Noctiluca scintillans es una especie cosmopolita en latitudes bajas y medias. En otras regiones del mundo las proliferaciones de Noctiluca pueden tener colores rosáceos e incluso verdes, debidas estas últimas a microalgas verdes que viven en su interior.
“Noctiluca no plantea ningún riesgo para la salud pública”, señala Francisco Rodríguez, investigador del Departamento de Fitoplancton Tóxico y Mareas Rojas del Centro Oceanográfico de Vigo, “aunque en algún caso se ha descrito sensación de picor leve en la piel asociado a la liberación de amonio en el agua durante sus proliferaciones”.
Su característica más llamativa, y que comparte con otros géneros de dinoflagelados, es la bioluminiscencia, que resulta especialmente intensa en Noctiluca debido a su tamaño. También conocida como “mar de ardora”, consiste en destellos de luz que se activan por agitación mecánica. La vibración activa en las células impulsos eléctricos que provocan una disminución del pH en los centellones (orgánulos celulares esféricos), que activa la luciferasa y libera la luciferina, la cual sufre una oxidación en la que se producen fotones azulados en Noctiluca (λ=475 nm). “Durante la noche se observó una intensa ardora, dado que las células no se dispersaron demasiado y podía verse todavía color en el agua al anochecer”, señala Francisco Rodríguez.