La ÉPOCA anunciada por REPSOL para las PROSPECCIONES en CANARIAS es la MÁS PELIGROSA del AÑO

Oceana señala que la época del año elegida por Repsol para realizar las prospecciones petrolíferas en Canarias es la de mayor peligrosidad de accidentes y cuando un vertido tendría mayor difusión en el medio marino. El verano es la estación en que los alisios azotan más fuertemente el archipiélago y sus aguas, por lo que no solo se incrementan los riesgos e accidentes, sino que la respuesta frente a un vertido es mucho más complicada.

Asimismo, se trata de una fecha clave para muchas de las especies marinas de Canarias, ya que es cuando se producen muchos de los levantamientos de nutrientes más importantes de la zona, lo que congrega una gran diversidad y cantidad de animales en sus aguas.

Es en esta fecha cuando se acercan a las costas canarias especies tan poco frecuentes como el delfín de dientes rugosos o el rorcual tropical. También es una época de gran importancia para los tiburones y otros elasmobranquios, incluidas especies en grave peligro de extinción, como el angelote o las mantelinas. Coincide con la época de reproducción de especies de interés comercial como la alacha o la serviola, y con una importante época de pesca de atunes y marlines.

Tanto los informes de la UE sobre upwelling y clima en la región macaronésica y africana como los del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente para la aplicación de la Directiva Marco de la Estrategia Marina en Canarias reconocen que los meses elegidos por Repsol son los menos idóneos.

A juicio de Oceana, la empresa petrolera ha querido mandar un mensaje a los canarios dejando claro que “harán lo que quieran y cuando quieran”, y para eso han utilizado como portavoz al Ministro José Manuel Soria, que es quien ha realizado el anuncio público.

“Repsol ha decidido castigar a los canarios por oponerse a sus pretensiones de buscar petróleo en el archipiélago”, declara Ricardo Aguilar, director de investigación de Oceana en Europa. “En el informe que realizó la empresa reconoce el peligro de vertidos, y a pesar de ello no ha presentado ni un plan de lucha contra la contaminación en caso de producirse un accidente ni un aval que sufrague los daños que pudieran producirse”.

El ministro ha decido dar carta blanca a Repsol pese a que sigue sin haber todavía ni siquiera un pronunciamiento del Tribunal Supremo. Para facilitar aún más la situación, ha ordenado al Ministerio de Medio Ambiente que paralice la declaración del área de conservación alrededor de las islas de Fuerteventura y Lanzarote que el Gobierno español se ha comprometido a crear frente a la Comisión Europea.