Día Mundial de los Océanos: Océana llama a la acción para proteger los ecosistemas profundos
Las especies y hábitats de profundidad son los más vulnerables del océano por su difícil recuperación ante la contaminación, la pesca agresiva y las prospecciones
Oceana pide que no se autoricen actividades potencialmente peligrosas antes de haber valorado científicamente su interés medioambiental
Oceana hace un llamamiento para que se dé prioridad a la investigación y conservación de las profundidades. En el Día Mundial de los Océanos, la organización internacional de conservación marina alerta de que hábitats y especies vulnerables sufren a diario graves daños que pasan desapercibidos. Este deterioro puede llegar a ser irreversible si se continúa postergando la toma de medidas de conservación.
“Los ecosistemas y especies de profundidad son los más vulnerables del océano. Muchos organismos tienen lento crecimiento y baja tasa de reproducción, por lo que los daños pueden resultar irreversibles”, explica Ricardo Aguilar, Director de Investigación de Oceana en Europa. “Actividades como la prospección de hidrocarburos, la minería o la pesca destructiva ya han llegado al fondo del mar, pero la conservación se queda en la superficie en el mejor de los casos”.
Las profundidades marinas son las grandes olvidadas en los proyectos de protección, debido al coste y a los condicionantes tecnológicos. Oceana considera que si no es posible estudiar científicamente una zona para valorar su importancia ecológica, tampoco deben autorizarse actividades dañinas que puedan deteriorarla.
“Es muy frecuente filmar basura o impactos de las redes de pesca a cientos de metros de profundidad, en lugares inexplorados. Hay que considerar que las agresiones al medio afectan a toda la cadena trófica, incluyendo a especies de gran consumo comerciales que se alimentan o crían a gran profundidad. Por tanto, parece sensato emplear un enfoque de precaución y proteger las profundidades marinas antes de que puedan ser arrasadas”, añade Aguilar.
Apartados de la luz solar se encuentran arrecifes de corales de aguas frías, comunidades de gorgonias y campos de esponjas que dan refugio y alimento a numerosas especies. También hay peces de interés comercial, como el besugo, la brótola, la cherna o el congrio, y diversas especies de tiburones y quimeras, entre otras.