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Comienza la temporada salmonera en Galicia

Ochenta mil aficionados gallegos sacan mañana sus cañas a los ríos gallegos en una apertura de campaña marcada por la complejidad y abundancia de normativa y la escasez de truchas ·· El 1 de mayo se abre la temporada para el salmón La temporada arranca mañana con la novedad de tramos libres sin muerte en A Coruña y Pontevedra. La pesca fluvial regresa a las truchas con talla mínima de 19 centímetros

La trucha es la protagonista mañana en jornada dominical y marca el inicio de la temporada de pesca fluvial para ochenta mil aficionados, que desde primera hora de la mañana abarrotarán todos los ríos y embalses gallegos para intentar llegar a los topes de capturas establecidos por Medio Ambiente. Son cupos variables de acuerdo a la normativa y que oscilan entre las seis y las diez truchas por pescador y día, dependiendo de la categoría de los cotos, zonas de ríos o embalses.
Otro asunto a tener en cuenta es la medida mínima reglamentaría para llevarlas al cesto, que varía también con los mismos principios que los cupos entre los 17 y los 25 cm. El cierre de temporada con carácter general se señala para el 15 de Agosto, excepto tramos de pesca sin muerte y cotos intensivos, donde la campaña de la trucha se retrasa hasta el 30 de septiembre y se pospone el inicio en las denominadas zonas salmoneras y cabeceras de los ríos de montaña hasta el 1 de mayo, conjuntamente con el salmón y reo.
Solo se podrá practicar la pesca en el periodo comprendido entre una hora antes de la salida del sol y una hora después de la puesta y los pescadores disponen de diez minutos para tener recogidos todos los útiles y cebos destinados a la acción antes o después de la hora límite . Asimismo, se deberá tener presente que no se podrá pescar los lunes, excepto festivos nacionales o autonómicos y que en los cotos de pesca también serán inhábiles los jueves.
De la normativa para esta temporada lo que más polémico para los aficionados es el aumento de talla, principalmente para aquellos que pescan en pequeños regatos, donde pescar truchas de 19 cm es casi misión imposible. Se sigue en Galicia con una normativa compleja y con demasiados condicionantes, en muchos casos contradictorios, que obliga a los pescadores a un cuidadoso control del lugar donde están y estudio del reglamento específico de cada zona para evitar problemas con la guardería. La sensación es, de seguir por este camino, en poco tiempo tendremos la Galicia de los mil ríos y las cinco mil limitaciones. ¿No podría simplificarse tanta norma?
La fiesta para los pescadores continúa el 1 de mayo, con el inicio de la temporada para la pesca del salmón, salvo algunos cotos del río Eo (Abres, A Pontenova y San Tirso) , que comienzan conjuntamente con la trucha el 15 de marzo. Aquí la finalización está marcada para el 31 de julio. Sin embargo, en algunos casos está sujeta a los cupos y no a fecha, como ocurre en los cotos del río Ulla, donde al alcanzar la cuota establecida de capturas se da por finalizada automáticamente la temporada. Concretamente en esta campaña se incrementa la cuota en diez ejemplares más en los cotos del Ulla. El pasado año eran cincuenta salmones y ahora serán sesenta. En referencia al tamaño, la dimensión mínima es 40 cm y la cuota diaria será de una captura. Entre los cebos permitidos están la mosca artificial, cucharilla, miñoca y quisquilla, teniendo en cuenta que las disposiciones reglamentarias limitan las dimensiones mínimas del anzuelo.

Para la pesca del reo el periodo hábil esta comprendida entre 1 de mayo y el 30 de septiembre. La medida legal será a partir de 30 cm. y se podrán pescar cinco ejemplares diarios como máximo. Otras especies procedentes del mar, como la robaliza, se ajustan a la normativa de pesca marítima y la cuota diaria de capturas es de cinco kilos.

Los cebos recomendados para estos primeros días son: miñoca, especialmente a primera hora de la mañana, cucharillas blancas y doradas y al mediodía la mosca puede dar buenos resultados.

El domingo arranca la temporada de pesca en Galicia y los aficionados se muestran satisfechos con la situación de los ríos. Todos ellos destacan que las abundantes lluvias de este invierno han servido para limpiar bien los lechos y fondos de los ríos y propiciar la reproducción. La temporada se presenta prometedora para los poseedores de las en torno a 80.000 o 90.000 licencias. Números similares a los de estos últimos años.
Así mismo y como punto importante el regreso, como norma general, al tamaño mínimo de 19 centímetros para las truchas (con diez piezas como máximo), aunque en 60 tramos, sobre todo del Miño-Sil, son 21 centímetros. Solo se permitirán capturar las de 17 centímetros en algunos cotos, donde pueden controlarse más las pescatas.
Según la Consellería de Medio Ambiente, esta vuelta atrás se explica por la sobreexplotación que detectó en los conteos de muchos tramos libres, difíciles de vigilar. Así, regatos o riachuelos con poca producción y talla casi no resultarán pescables, dicen algunos aficionados, pero el técnico Fernando Tilve defiende que tampoco los 17 centímetros habían tenido un efecto de gran satisfacción para los pescadores. «Es dificil prever como irá esta temporada -explica-, los peces a pescar son los nacidos hace dos o tres inviernos, y por lo menos de aquella no hubo grandes crecidas que arrasaran los frezaderos de los ríos».

Otra novedad es la apertura de cinco nuevos acotados en ríos de Lugo. Son tramos en A Fonsagrada, Friol, Guntín, Santalla de Lóuzara y Valadouro que ya el pasado año estuvieron vedados, por lo que se espera que den juego a los aficionados. En ríos de A Coruña y Pontevedra habrá además tramos libres de pesca sin muerte, que ya existían en zonas rurales de Lugo y Ourense. Los nuevos están en los ríos Deza, Mente, Miño y Umia, además de otros en el Sarria y Narla. Hasta ahora, los tramos sin muerte para los que era necesario pagar permiso tuvieron poco éxito, pero se espera relanzar la modalidad con el acceso libre y ver su funcionamiento y aceptación en riberas urbanas como las del Anllóns, en Carballo, casi experimental.

En cuanto al salmón, cuya pesca abre mañana sin cupos en el Eo, y para el resto en mayo, se amplía el cupo en el Ulla hasta los 60 ejemplares, una vez que el pasado año se completó muy rápido la captura de los 50 permitidos, en el coto de Ximonde. Por eso, dicha ampliación de diez es únicamente para los cotos de Sinde y Couso. No obstante, en Ximonde se mantendrá abierto para la pesca sin muerte del salmón, si se agota por anticipado el cupo antes del 31 de julio, y el tramo salmonero se ha extendido hasta una de las nuevas presas en el Ulla, el Salto de Touro. El coto de pesca de Ximonde en el río Ulla, y situado en el término municipal de Vedra, experimentará una mejora sustancial tras una inversión de 450.000 euros por parte de la Consellería de Medio Ambiente, que ha licitado un proyecto de acondicionamiento y puesta en valor del entorno de este coto salmonero, uno de los más conocidos en el tramo bajo del río Ulla. Se trata de una iniciativa municipal, que ha emprendido un ambicioso programa de recuperación y conservación del medio natural. En el caso concreto del coto se acondicionará el refugio de pescadores, previa limpieza y reconstrucción de los puestos de pescadores y acondicionamiento de la zona de amarre de las barcas. Pero la actuación más destacable será la creación del Centro de Interpretación del río Ulla. Con estas iniciativas el Concello de Vedra espera rentabilizar el coto «como espazo natural e definidor do río Ulla como eixe artellador de toda a comarca».

Según el Presidente de la Federación Gallega de Pesca, Pedro Romaris, la mala situación de muchos ríos gallegos le preocupa y reclama que se den a conocer los nombres de quienes infringen las normativas medioambientales como efecto disuasorio contra la contaminación.
En cuanto a la temporada, comenta que se se presenta bien. "Esperamos que las capturas sean similares a las del año pasado, aunque la tendencia es a la baja, porque se nota que cada vez hay menos truchas. Algunos tramos de ríos se están recuperando, pero la mayoría se mantienen. Hay mucha diferencia entre las zonas sin contaminación industrial y las que sí la tienen. El entorno de O Porriño y Vigo e incluso parte de Carballo, quizá sean los más dañados. En el Eume, las obras de la autovía también han afectado mucho".

En la zona de los ríos Ulla, Deza Arnego... es decir comarcas de A Estrada, Lalín, Silleda... este año no se realizó ninguna repoblación y destaca la novedad de este año que es disponer de un tramo del río Deza de pesca sin muerte, en concreto en el trecho comprendido entre el puente situado en la carretera que va de Silleda a Vila de Cruces y la desembocadura del río Mera. Las sociedades de pesca de la zona llevaron a cabo, al igual que en años anteriores, el desbroce de caminos y la recogida de plásticos y otros residuos de los márgenes de los ríos.
En A Estrada, el presidente de la Sociedade de Pesca Río Ulla, José Manuel Señoráns, destaca las buenas expectativas con las que los aficionados inician esta nueva temporada. Entre las novedades de este año destaca el cambio en las bases del concurso internacional de pesca del salmón que se están elaborando de cara, señala, «a abrir a todo o mundo o acceso o certamen». Al mismo tiempo en Río Ulla están pendientes de algunas comprobaciones de pesca eléctrica cuyos resultados fueron muy buenos, destacando el del río Liñares. El número de cotos, respecto al año pasado se incrementa en dos, y entre ellos se encuentra un tramo de pesca sin muerte. Luis Nistal, presidente de la Sociedade de Caza y Pesca de Lalín, deseaba ayer la bonanza de la climatología, el buen estado de los ríos «limpios y con mucha agua» y señalaba que las colonias estaban muy compensadas. En Lalín se realizó ya el sorteo y se espera que el primer día de la temporada acudan a los cotos del Asneiro y el Arnego, en Lalín y Rodeiro, unas sesenta cañas. Los cotos son en el Arnego, 10,5 kilómetros de pesca de trucha desde Ponte Hospital a Ponte Alemparte, 8,1 kilómetros en el Asneiro desde Ponte da Xesta a la antigua fábrica de la luz, en la presa de Botos, 7,1 kilómetros en el Curantes, 8,3 en el río Deza, en Taboada, 9,4 kilómetros en el Lérez en Forcarei y 7,5 en Cerdedo. A estos se añaden 8,1 kilómetros en el Liñares, en A Estrada, tres tramos de coto de 10,7, 5,3 y 5,3 en el Toxa ,, 5,2 en el Bea y tres tramos de salmón en el Ulla.

Otra noticia importante es en la provincia de A Coruña es el correspondiente a uno de los desastres más grandes de los últimos años, Tras el desastre en A Fervenza, el río Xallas abre pero acotado sin muerte. Tras la gran mortandad de peces registrada en la presa de Fervenza, que quedó seca, y el plan de protección del Xallas, vedado por ese motivo durante la última temporada, Medio Ambiente ha decidido acotarlo y abrirlo de nuevo a la pesca, pero en la modalidad sin muerte, aunque habrá que pedir los permisos a 1,5 euros para disfrutar de la pesca de truchas.

Respecto al Xuvia se considera masa para el reo, tras detectarse muchos ejemplares en el curso alto, una vez que se habilitó una escala en la fábrica de luz, que antes apenas franqueaban los reos más fuertes. Mejora la permeabilidad para estos migradores y, para permitir su regreso al mar en abril, se cierra el río hasta mayo.

En la provincia de Lugo, de gran tradición pesquera, lLos más veteranos insisten en que la campaña no será de las mejores, sobre todo por el deterioro de los ríos. Según los datos facilitados por la Sociedad Val de Lemos, en la zona se han expedido 4.000 licencias, lo que se traducirá en una masiva afluencia de pescadores a los principales ríos. En esta zona lamentan profundamente la permisividad de la administración en varias cuestiones. «Sien estudios y sin ningunha pauta se metieron peces foráneos, blak-bass, carpa, y luego vendrá el lucio, que son auténticos depredadores que acaban con la trucha autóctona.apuntan. El Cabe es el que más truchas tiene. Además, junto con el Lor son los más limpios. El que está intransitable es el Mao» Por lo que respecta a la normativa, en los ríos de la zona sur, es decir Cabe, Mao y Lor, la medida mínima de la trucha será de 19 centímetros. Los 17 sólo se mantienen en la comarca de la Ulloa.Vedado del Cereixa y Rioseco, medida tomada porque hay pocas truchas y pensando en el futuro.