"En la costa asturiana hay aún muchos barcos hundidos por descubrir"
El arqueólogo y buceador profesional Carlos León Amores estuvo ayer en la Librería Cervantes de Oviedo para presentar el libro Buceando en el pasado, sobre los naufragios marítimos.
¿Qué nos cuenta en su libro?
La historia de 20 barcos naufragados, desde la edad del bronce hasta el siglo XVIII. Muchos tienen lugar en el Mediterráneo y los más modernos son en América.
Usted busca barcos hundidos, ¿Qué es lo que más se encuentra?
Galeones, que son muy voluminosos y en España hay mucha documentación sobre ellos. Son una mezcla de barco mercante y de guerra, ya que iban armados con cañones para defenderse.
¿Hay tantos barcos españoles hundidos como dicen?
Sí, más de mil. Estamos haciendo un inventario de todos los navíos hallados en países como Cuba sólo entre los siglos XV y XVIII y ya llevamos más de 100.
¿Y en la costa asturiana?
Hay mucha tradición de arqueología submarina gracias a la Universidad de Oviedo. Hay aún muchos barcos por descubrir en estas costas.
¿Se siguen descubriendo barcos aún hoy?
Diariamente. Hace poco estuve en República Dominicana y pude ver un buque lleno de tesoros.
¿Cómo se realiza una búsqueda como esta?
Buscamos en archivos, para saberlo todo sobre ese barco. Luego rastreamos el mar con sónar, cámaras y magnetómetros, como los piratas. Competimos con ellos, pero las autoridades tenemos menos medios. Por ejemplo, el Odyssey fue capaz de encontrar un navío a 1.500 metros de profundidad, algo imposible para nosotros.
¿Cuál es el barco más valioso que hay bajo el mar?
Un barco fenicio del siglo VII a. C. en Mazarrón (Murcia), que está a apenas dos metros de profundidad. Mide unos ocho metros y se conserva entero.