El científico Headland teme depredación de pesca en Antartida
El científico británico Robert Headland, director del Archivo del Instituto Scott de Investigación Polar, de la Universidad de Cambridge, considera que la Antártida se enfrenta a su tercera depredación biológica: la masiva pesca de krill, peces y cefalópodos. Las anteriores depredaciones, según Headland, se produjeron por primera vez en el siglo XVIII, cuando la caza de focas redujo tremendamente su población en la Antártida, y por segunda, en el siglo XIX, cuando los balleneros diezmaron la población de cetáceos.
Mientras las primeras dos depredaciones provocaron dos "desastres ecológicos", esta tercera depredación "está más controlada biodinámicamente y se produce bajo supervisión científica", manifestó Headland.
Así, el futuro de la Antártida "biológicamente hablando, se presenta bastante halagüeño y suficientemente regulado, sobre todo gracias a la aplicación rigurosa del Tratado Antártico", que funciona según el lema de "si no está roto, no lo arregles", dijo el científico británico.
Headland, que regresó de la Antártida el pasado mes de febrero, se encuentra en Madrid participando en unas jornadas sobre el Continente Helado organizadas por CosmoCaixa.
Actualmente director de la mayor biblioteca del mundo sobre la Antártida, Headland se ha dedicado a este contingente -en sus aspectos biológicos, históricos y geográficos- desde 1977 y ha estado embarcado en diferentes buques de la Royal Navy, incluido el Endurance, trabajando para el British Antartic Survey.
El científico británico ha estudiado sobre todo la introducción de especies y la distribución de animales y plantas en Antártida y Peri-Antártida (las 19 islas diseminadas en latitudes próximas al continente austral, que incluye las Malvinas, las Georgias del Sur y las Shetland). Sus investigaciones incluyeron también la incidencia del ser humano en las condiciones de "extremo aislamiento y extremo frío que rige en la Antártida ahora y que muy probablemente existía en Europa hace 20.000 años".
"Es interesante estudiar la Antártida los fenómenos que se presentan pueden ser muy similares a los que se produjeron en Europa en la última glaciación y a los que probablemente vuelvan a producirse", indicó.
Su más reciente proyecto antártico estuvo centrado en la estación meteorológica instalada por el escocés William Bruce en 1903 en la isla Laurie en el archipiélago de las Orcadas del Sur.
Después de un año de mantenimiento escocés, "la estación meteorológica pasó los siguientes 99 años bajo mantenimiento argentino y, ahora mismo, es la estación más antigua de toda la Antártida y en febrero celebramos allí mismo que lleva un siglo enviando datos". Headland organizó la logística de esta expedición a la Isla Laurie.