Crear un “santuario marino” en el mar de Alborán
Con este proyecto se estrena la Oficina del Mediterráneo de la UICN en Málaga.
El mar que baña nuestras costas es un lugar privilegiado en el mundo por ser zona de paso migratorio de delfines, ballenas y tortugas, especies protegidas por la UE.
El estudio de las poblaciones y la puesta en marcha de medidas para su conservación son las claves de este proyecto.
Oceanógrafos y biólogos de todo el mundo coinciden en un punto: el mar de Alborán tiene una situación biológicamente estratégica por el paso de delfines, tortugas y ballenas durante las épocas migratorias, máxime teniendo en cuenta que todas estas especies son consideradas vulnerables o en peligro de extinción por la Unión Europea.
Por este motivo, la Oficina del Mediterráneo de la UICN, ubicada en el PTA, se estrena con un ambicioso proyecto por el que pretende crear un 'santuario marino' en el mar de Alborán-que baña nuestras costas desde el Estrecho de Gibraltar hasta las costas de Almería- para proteger a las tortugas y mamíferos marinos.
Crear un santuario, figura de protección que ya existe en el mar de Liguria (entre Francia e Italia), tiene como objetivo estudiar las poblaciones de cetáceos en el mar de Alborán y crear un Lugar de Interés Comunitario (LIC)dentro de la futura Red Natura 2000.
El actual responsable de la Oficina del Mediterráneo en Málaga, Andrés Alcántara, trabaja codo a codo con los biólogos del Aula del Mar y los miembros de la Sociedad Española de Cetáceos (SEC) para presentar este proyecto a programas medioambientales de la Unión Europea.
Este plan, en el que se involucrarán tanto el Ministerio de Agricultura y Pesca (MAPA) como la Junta de Andalucía y el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona)de la Guardia Civil y el Servicio Marítimo Provincial del mismo cuerpo pretende también que participen instituciones marroquíes y argelinas para el área de protección en el mar de Alborán sea toda una realidad.
El procesamiento de la información se realizará en la Oficina del Mediterráneo, el seguimiento de las poblaciones lo realizarán tres barcos de la Sociedad Española de Cetáceos (SEC), y el Aula del Mar potenciará su Centro de Recuperación de Especies Marinas Amenazadas (CREMA), que en los últimos cuatro años ha recogido más de 500 mamíferos marinos varados en las playas y acantilados.
andaluces, entre los que se encontraban tortugas boba y laúd, delfines, marsopas, rorcuales o cachalotes.
La elaboración de este plan incluye campañas de sensibilización de la población sobre la importancia de estas especies en el ecosistema marino. , la puesta en marcha de un plan de acción para la recuperación de la tortuga boba y la reducción del impacto de sus capturas accidentales con el arte de palangre, y un análisis sobre la destrucción de las zonas de desove de las tortugas.